10 Consejos para la retirada del pañal

Este post se publicó originalmente el 12/08/2021 y ha sido actualizado en fecha 26/08/2024

El control de esfínteres es un hito madurativo que combina aprendizaje (qué es la eliminación, cómo y dónde se hace) y maduración (ser capaz de controlar), siendo ambas cosas necesarias para que suceda. Por eso, antes de intentar la retirada del pañal, hay ciertos consejos que es conveniente tener en cuenta.

La retirada del pañal: un proceso madurativo y educativo

El aprendizaje tiene sentido porque dejar el pañal es una cuestión de ecología, de higiene, y por supuesto, de autonomía: un peque que no lleva pañal es una familia que genera menos residuos, o en el caso de los pañales de tela, que gasta menos agua y electricidad, y además es un peque que depende menos de los demás para estar limpio y cómodo.

Curiosamente (o quizás no sea tan curioso, porque uno ya no sabe qué pensar), en España solemos intentar que dejen el pañal no tanto por la ecología, la higiene y la autonomía, que también, sino sobre todo porque el peque empieza el primer curso del ciclo inicial (lo que conocemos como P3).

No es que pase en todos los centros, pero en muchos no dejan que niños y niñas vayan con pañal a clase, pese a que de ese modo podrían estarse violando varias leyes y derechos fundamentales de los niños (y es que no se hace pensando en lo que es mejor para cada peque, sino por una cuestión logística: no hay personal de apoyo suficiente para atender adecuadamente a todos los menores, y pagan el pato los de siempre, los peques).

10 Consejos para la retirada del pañal

Así, pensando en las primeras razones (las educativas, higiénicas y ecológicas), os dejo con 10 consejos que os pueden ayudar para la retirada del pañal:

1. Empieza ya

Hazle partícipe, en cuanto camine, de cada cambio de pañal. Que le digas lo que vais a hacer y por qué, y ofrecerle la posibilidad de bajarse las prendas, de coger la toallita o la esponja, de que se limpie un poco también, se suba de nuevo los pantalones, etc.

2. Sé respetuoso/a

Fuiste tú quien le puso el pañal y le acostumbró a hacer ahí sus necesidades. Y aunque creas que no había alternativa, la había (los pañales desechables no han existido toda la vida, y de hecho no existen en muchos países, donde llevan a cabo otras estrategias para que los peques controlen mucho antes, ni que sea a través de ciertos condicionamientos conductuales).

3. Quizás aún no es capaz

Ten en cuenta que nadie más que tu peque sabe exactamente cuándo está preparado. Las cifras nos dicen que a los 30 meses de edad solo el 50% de los niños son capaces de controlar los esfínteres. A los tres años, es el 75%, y a los tres y medio, el 95%. Por eso hay peques que entran en el colegio a los dos años y unos cuantos meses, que aún no han cumplido los tres años, y aún necesitan llevar pañal.

4. Ayúdale a crecer y madurar

El control de esfínteres está muy relacionado con el desarrollo y la maduración a nivel general. Un peque que es más autónomo en otras áreas (que ya no usa chupete ni biberón, que se empieza a vestir solo, que come solo…), será también más autónomo en la eliminación.

5. No es «mayor», ni «grande» ni «ya no eres un bebé»

A la hora de hablar del paso del pañal a la ropa interior, es importante evitar estos términos, porque acaban por pensar que ser un bebé es malo y ser mayor bueno. Y que controlar es ser mayor, y tener escapes, es ser un bebé, y por lo tanto, algo malo o de lo que avergonzarse.

6. Ni premios ni castigos

De igual modo, no es mejor hacerlo en el orinal, ni peor hacerlo en el pañal, y por eso no hay que hacer ninguna fiesta ni darle ningún premio si lo hace en el orinal o el WC, precisamente porque no hacemos lo mismo si lo hace en el pañal.

7. Lo ideal sería que se lo quitaran solos en un proceso de meses, sin metas ni prisas

No olvides que si no haces nada de nada, absolutamente nada de nada, tu hijo-a dejará el pañal un buen día, por imitación y porque, simplemente, diga que le da calor y ya no lo necesita. Y es que ningún niño ni niña lleva pañal si es consciente de que no lo necesita y está preparado para no llevarlo.

8. Cuéntale qué es el pipí y la caca, y por qué lo hacemos en el váter

Puede ayudar algún cuento, puede ayudar (ayuda mucho, de hecho), permitir que nos acompañen al baño, que nos imiten, que jueguen a hacer pipí o caca en el retrete… pero siempre sin agobiarles con el tema. En cuanto se dan cuenta de que para nosotros es importante, se empiezan a sentir presionados y tratan de recuperar el control, dando un pasito atrás, cuando resulta que se lo hacían encima y no estábamos tan agobiados.

9. Prueba sin ropa

Para que vea su pipí y su caca, que hay que limpiarlo y que la próxima vez te pueda avisar o ir al WC. Por eso se suele decir que en verano es más fácil, porque los puedes dejar sin ropa y así no solo no se manchan, sino que ven perfectamente cuál es la consecuencia de no ir al baño. Ven la orina, ven la caca, y podemos decirles cómo se llama cada cosa, que hay que limpiarlo, y cuál es la alternativa a hacerlo en cualquier sitio.

10. Que escoja entre el orinal, el retrete (con reductor y banquito para que no le cuelguen las piernas) y un pañal

Cuando decida que tiene que ir al baño, tiene que poder elegir dónde hacerlo porque en realidad, lo que interesa es que controle, y no tanto el dónde lo llegue a hacer. Muchos peques usan pañal una temporada y se lo quitan al acabar de hacer caca, hasta que un buen día deciden que ya lo pueden hacer en el orinal o el váter.

No tengáis miedo al pañal

Si tras dos o tres días notáis que no hay avances, poned el pañal de nuevo. No es un retroceso, porque para retroceder, antes hay que avanzar. Y no, no envías ningún mensaje confuso ni contradictorio a tu peque por quitarle el pañal y luego ponérselo otra vez. Si tienes dudas al respecto, en la Tribu CSC podemos asesorarte sobre la mejor manera de acompañar de forma respetuosa a tu peque en todo el proceso.

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Igual que hay días en que será capaz de vestirse solo y otros en los que pedirá que le ayudes, o días en que jugará solo con otros niños y otros en los que querrá que estés a su lado, habrá días que no querrá pañal, y otros en los que se sentirá más seguro/a con él, y no pasa nada… Porque insisto: es más que probable que con 15 años ya no lo use, hagas lo que hagas.