La falta de sueño reparador hace estragos, tanto en los menores como en las personas adultas a su cuidado. Quizá por eso, algunas de las dudas más recurrentes están relacionadas con el sueño y, dentro…
El descanso es fundamental para que los niños se desarrollen tanto física como psicológicamente. Si los peques no duermen las horas suficientes o no gozan de un sueño reparador, esto afecta a su concentración, aprendizaje y estado de ánimo. Ahora, los pediatras alertan de que la pandemia aumenta el insomnio y las pesadillas en los niños.
La pandemia aumenta el insomnio y las pesadillas en los niños
Se está elevando la tasa de las alteraciones de sueño infantil durante la pandemia. Así lo manifiestan pediatras y neurólogos infantiles, que alertan de que la pandemia multiplica las consultas de niños y adolescentes por alteraciones del sueño.
Más concretamente, declaran un aumento de los casos de insomnio y problemas nocturnos de los pacientes menores en consulta. De hecho, los principales trastornos de sueño infantil durante la pandemia que han sido detectados en consulta son la dificultad para conciliar el sueño (insomnio de inicio) y las parasomnias, principalmente las pesadillas.
El miedo a la enfermedad, la angustia detectada en los adultos que les rodean, los cambios de hábitos (como dejar de ver a los abuelos o no poder reunirse en familia, ir al parque o jugar con otros niños), los familiares enfermos (o fallecidos), los comentarios de los adultos delante de los niños y las noticias constantes sobre el número de contagios y fallecimientos son los principales motivos del aumento del estrés y/o la ansiedad infantil, así como de los problemas de sueño en los menores.
Alteraciones de sueño infantil durante la pandemia
Como consecuencia del aumento del malestar nocturno, también han aumentado los casos en los que los niños rechazan irse a la cama (o no quieren irse a la cama solos, en el caso de los más pequeños, incluso aunque ya lo hicieran con anterioridad a la pandemia), los despertares nocturnos y las regresiones del sueño (el niño o la niña había conseguido empezar a dormir del tirón pero, de repente, no deja de despertarse cada pocas horas).
Además, el cambio de hábitos al que obliga la pandemia ha dejado a muchos pequeños sin poder practicar deporte o realizar mayor número de actividades lúdicas o físicas en el exterior, junto a otros menores. Así, nos encontramos con un aumento de energía en los niños y niñas, que choca directamente con la dificultad para gastarla durante la pandemia.
Ahora no pueden jugar tanto con otros peques, ni salir tanto al parque, ni en muchas ocasiones seguir practicando su deporte favorito, hay localidades confinadas y toque de queda, etc. y los pequeños solo pueden «cansarse» dentro de casa (que no es lo mismo que aburrirse) y a veces eso no es suficiente. Como consecuencia, llegan a la hora de dormir llenos de vitalidad y con ganas de moverse.
Recomendaciones de sueño para niños durante la pandemia: lo mejor es mantener las rutinas
Para intentar que los niños y niñas sufran lo menos posible las consecuencias de la pandemia, podemos poner en práctica una serie de consejos prácticos para aliviar, en la medida de lo posible, el agravamiento de estos problemas relacionados con el cambio de hábitos y los horarios para acostarse y levantarse, o por el estrés y la ansiedad que la actual situación les genera.
En primer lugar, para que nuestros hijos-as puedan seguir gozando de una buena salud del sueño lo más importante es mantener las rutinas diarias y llevar a cabo unos horarios estables, incluso aunque estén confinados. Esto proporciona una necesaria estructura a los días de los pequeños, lo cual les otorga seguridad, tranquilidad y confianza.
También se sentirán mucho más reconfortados si controlamos el flujo de información que llega hasta sus pequeños oídos (ya que pueden magnificar ciertos datos o interpretarlos erróneamente). Los niños y niñas son muy buenos captando los estados de ánimo de los adultos que les rodean… ¡pero no son tan buenos interpretándolos!
En este sentido, mantener con ellos un diálogo basado en la honestidad, animarles a plantear sus dudas y preocupaciones, así como responder adecuadamente a las mismas, puede contribuir a aumentar la tranquilidad y la autoestima de los más peques de la casa.
En el caso de los más pequeños, la experta en sueño infantil y miembro del equipo de Criar con Sentido Común, Rafaela López nos recuerda que «los bebés y los niños necesitan sentirse seguros y cerca de sus padres para dormir tranquilos» y, en este sentido, nos anima a intentar alcanzar un equilibrio «sin llantos, sin que nadie sufra».
Asimismo, podemos proporcionar a nuestros hijos e hijas mayor número de actividades de interior materiales que fomenten el movimiento dentro de casa para que así puedan descargar toda su energía y desarrollarse con plenitud, tanto física como psicológicamente. Al fin y al cabo, el movimiento es salud. ¡Y un peque que puede moverse libremente, es un peque feliz!
Si tienes cualquier duda, en la Tribu CSC hay expertos en sueño y desarrollo infantil, así como en crianza respetuosa que pueden atenderte online y ayudarte a mejorar la calidad de vida de tu familia… ¡Empezando por el descanso!
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