Os proponemos la cuarta entrega de actividades de verano para peques. Y es que el verano continúa avanzando y nos metemos de lleno en la época estival. Quizá el calor, la cantidad de horas compartidas…
¡Ya estamos en verano! Algunos estaréis deshaciendo maletas y otros intentando cerrarlas para emprender viaje. Sea como fuere, el verano todavía nos reserva un montón de días de juegos para hacer en familia.
Desde Criar con Sentido Común os seguimos echando una mano para entretener estos días que, a veces, se nos hacen más largos y no sabemos cómo canalizar toda esa energía que tienen los peques. Por supuesto, siempre con juegos creados a partir de objetos que todos tenemos por casa y que se puedan realizar en casi todas las situaciones.
Juegos para hacer en familia
Afrontamos el último día de julio y el comienzo de agosto con otro ramillete de actividades. ¡Vamos allá!
La búsqueda del tesoro
Esta es una actividad que nos puede hacer pasar una tarde fantástica y uno de los juegos en familia más divertidos. Eso sí, necesita un poco de preparación. Se trata de poner una serie de pistas por la casa hasta llegar a una recompensa final. Las pistas se pueden hacer de diferentes maneras dependiendo de la edad de los peques.
Para los más chiquitines basta con tener que buscar, por ejemplo, un objeto que esté en el lugar que indica la pista (busca en el cesto de la ropa del cuarto de baño). Cuanto más mayores son, las podemos ir complicando con adivinanzas como “sube llena, baja vacía, si no comes rápido, la sopa se enfría” para que tengan que ir a buscar la siguiente pista al cajón de los cubiertos.
En las pistas podemos incluir determinadas pruebas como por ejemplo que, para ir de una a otra, tengan que ir saltando con los pies juntos, a la pata coja o caminando de lado o hacia atrás. Al final de la búsqueda podemos poner una recompensa. No tiene por qué ser un premio material. Puede ser una sesión de cosquillas, una película que quieran ver o una excursión a un lugar bonito.
Esta actividad nos servirá para favorecer el desarrollo del pensamiento lógico, el vocabulario, las habilidades motoras y la paciencia puesto que es necesario encontrar todas las pistas para llegar a la recompensa.
Disfraces caseros
A muchos peques les encanta disfrazarse. Si el tuyo es de los que adora los disfraces, esta actividad le encantará. No se trata de ponerse un disfraz que ya tenga sino de crear uno a partir de las cosas que podamos encontrar. Con unos pañuelos, algún sombrero, un cinturón y unos calcetines podemos inventar disfraces muy divertidos.
Podéis pensar que esta actividad en casa es muy fácil, pero cuando estamos de vacaciones quizá no tenemos tantos medios. Si este es vuestro caso, que no cunda el pánico, toca agudizar el ingenio. Podéis aprovechar las toallas, las gorras, los pareos o incluso convertir unas bermudas en una camiseta.
Es importante que tengamos en cuenta que nuestra percepción de los juegos no es la suya y, por tanto, debemos ser capaces de mirar con sus ojos. Quizá pienses que, con lo que tienes, no se puede hacer un disfraz de nada en concreto y, por tanto, no se podrá jugar. Nada más lejos de la percepción de un niño.
Te aseguro que no les importa demasiado si el disfraz es de cocinero o policía. Lo que les importa es ponerse y quitarse cosas, probarse y mirarse en un espejo para ver el resultado. Una toalla a modo de turbante, un montón de pañuelos cogidos por la cintura del pantalón, unas gafas de sol y los zapatos de mamá, son razón suficiente para pasarlo bien.
Con esta actividad desarrollaremos su creatividad, pero también la motricidad fina y la coordinación puesto que tendrán que colocarse las prendas de manera adecuada.
Formas y texturas
Esta es otra actividad que se puede graduar en dificultad dependiendo de la edad de los peques. Solo necesitamos una bolsa de tela y varios objetos. Meteremos los objetos que hayamos seleccionado y… ¡a jugar! Los más pequeños solo deben meter la mano, tocar uno de los objetos, sacarlo y dejarse sorprender con lo que es. Los mayores pueden jugar a adivinar qué es lo que están tocando sin verlo.
Los objetos que seleccionemos son la clave para establecer variaciones en el juego. Por ejemplo, podemos meter objetos con texturas muy diferentes como una lima de uñas, un pompón, una cucharilla o algo metálico o un paño de rizo. Pero también podemos meter cosas de forma similar (como una manzana, una pera, una naranja o una ciruela) o muy pequeñas para que tengan que discriminar con las yemas de los dedos (en este caso es importante no bajar la guardia y tener mucho cuidado con los más peques).
Si os dais cuenta, la piel es el órgano más grande del cuerpo y, muchas veces, olvidamos la cantidad de información que nos aportan los receptores que están repartidos por ella. Gracias al tacto somos capaces de percibir la temperatura, la textura, la dureza y la presión. El cerebro se encargará de interpretar la información recibida y, posteriormente, tendrán que encontrar la palabra que se corresponde con lo que han tocado. Interesante, ¿verdad? Así que como veis merece la pena que, privándoles del sentido de la vista, pongan el foco en lo que sienten a través de la piel.
Juegos en familia: Las nubes
Los días de verano nos regalan muchas veces cielos increíbles. Vamos a aprovecharlos para encontrar un ratito de calma. Basta con tumbarse. No importa dónde. Puede ser en la playa, en el césped del jardín, en una hamaca en el balcón… Como imaginas, la actividad no es más que observar las nubes. Es importante que les hagamos conscientes de cómo se van moviendo y cambiando de forma y, tras esto… buscar formas en ellas.
Es posible que no aguanten más de cinco minutos. No te preocupes. Poco a poco irán cogiendo el gusto por esos momentos de calma y el juego de buscar formas a las nubes os puede dar momentos muy bonitos en cualquier paseo o incluso en momentos de espera cuando no hay más recursos. Los peques desarrollarán la imaginación y aprenderán a observar el mundo que les rodea desde esa calma que tanta falta nos hace a los adultos.
Y con esta actividad terminamos el mes de julio y nos ponemos en marcha para afrontar un agosto repleto de juegos sencillos pero muy productivos. Si necesitáis más recursos para entretener de forma lúdica y educativa a vuestros peques, os esperamos en la Tribu CSC.
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¡Feliz juego familias!
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