Mi hija, con tres años y medio, tiene las cosas muy claras: cuando sea mayor quiere ser mamá ella sola, sin papás de por medio. Está claro que para eso queda mucho y las cosas…
La familia es la primera estructura social en la que participamos. En ella nos relacionamos a través de lazos afectivos que implican interrelaciones entre todos los miembros. Hoy hablamos de en qué casos es recomendable la terapia familiar.
Bajo el paraguas de la familia, en cualquiera de sus formas (nuclear, extensa, monoparental, reconstituida…) transmitimos a nuestros/as hijos/as valores, normas, costumbres y pautas de conducta. Esta transmisión esta influenciada por factores históricos, sociales, económicos y culturales.
Como sistema social, la familia es una estructura organizada, jerárquica y que establece relaciones con el entorno. Así, cualquier situación o cambio que afecte a uno de sus miembros, afecta también, directa o indirectamente, a los demás.
¿Cómo saber si necesitas terapia familiar?
Dado que la familia es un sistema que se extiende a lo largo de los años y que está compuesto por varias personas, cada una con sus características y peculiaridades, es necesario que el engranaje funcione correctamente porque sucederán cambios que necesitarán ajustes como nuevos nacimientos, fallecimientos, cambios de trabajo, problemas psicológicos en alguno de sus miembros, etc.
Una familia funcional es aquella en la que existe una comunicación fluida entre sus miembros que son conscientes de que pueden expresarse sin ser rechazados. El funcionamiento saludable de una familia incluye que todos sus miembros conozcan las normas y las respeten (y que estas sean respetuosas y coherentes para todos los miembros), y fomentan el desarrollo y crecimiento de todos sus componentes.
Habitualmente, las familias se van adaptando de manera natural a los cambios u obstáculos que puedan surgir, pero, en ocasiones, uno o varios de los miembros no encuentran la forma de gestionarlo y termina afectando a todo el sistema.
Si esto ocurre, y no somos capaces de manejar los problemas o no mejoran con las herramientas que tenemos, es el momento de hacer terapia familiar.
¿Qué es la terapia familiar? ¿Cuándo es recomendable la terapia familiar?
La terapia familiar es un tipo de psicoterapia que interviene sobre la unidad familiar en sentido amplio, es decir, la terapia no se enfoca hacia uno de los integrantes de la familia sino hacia todo el sistema.
¿Cuándo es recomendable la terapia familiar? Son muchas las situaciones que pueden llevarnos a necesitar terapia familia. Vamos a ver algunas de ellas:
Problemas de comunicación y/o disparidad de criterio entre sus miembros
Cuando los miembros de una familia no son capaces de comunicarse de manera asertiva y respetuosa, a menudo, surgen conflictos que pueden llegar a enquistarse.
Es frecuente que aparezcan problemas de comunicación en la crianza de los/as hijos/as cuando los progenitores tienen puntos de vista diferentes en las cuestiones básicas de la misma. De esta forma, aspectos como no ponerse de acuerdo en cómo debe ser la alimentación o las pautas de sueño, por ejemplo, pueden dar lugar a posturas irreconciliables.
Todos sabemos que la crianza no siempre es fácil y puede generarnos periodos de estrés o ansiedad.
A veces no es necesario que suceda nada especialmente significativo. Pequeños desacuerdos diarios en cuestiones aparentemente sin importancia como decidir si dar un trozo de pan al peque antes de comer o sopesar si rechazar una comida en casa de los abuelos, pueden llegar a generar problemas de comunicación si se repiten con frecuencia y no se solucionan adecuadamente. Es frecuente en consulta escuchar expresiones como “esto ya ha sido la gota que colma el vaso”.
Por ello, es importante que todos los miembros de la familia sean capaces de comunicarse correctamente. Respetar las posturas de los demás y buscar acuerdos positivos para todos son cuestiones a trabajar.
Trastornos psicológicos en alguno de sus miembros
La aparición de trastornos psicológicos en un miembro de la familia influye en los demás de alguna manera. La terapia familiar en estos casos está indicada tanto para la comprensión del trastorno por los demás miembros de la unidad familiar, como para adquirir recursos válidos para apoyar a la persona que lo padece que, además, debe recibir psicoterapia individual.
Conflictos entre miembros de la familia
Surgen habitualmente en el ámbito de la familia extensa. Cuestiones como repartos de herencias, cuidado de los familiares más mayores o tomas de decisiones en aspectos que afectan a toda la familia pueden dar lugar a conflictos que pueden enquistarse y es necesario reconducir.
Nacimiento de un nuevo hijo
Cuando llega un nuevo miembro a la familia es conveniente tener previstas algunas herramientas que vamos a necesitar para reajustar la familia. Por tanto, es importante trabajar tanto con los progenitores como con los/as hermanos/as y las relaciones entre ambos para minimizar el impacto de la llegada del nuevo bebé y preparar una acogida adecuada.
Enfermedad o fallecimiento de un familiar
En ocasiones, los duelos son difíciles de gestionar y es necesario que los miembros de una familia puedan cerrar los procesos en los casos de fallecimiento de un familiar. De la misma manera, la enfermedad de un miembro de la familia puede impactar en los demás sobre todo si otro de los integrantes se dedica a los cuidados de la persona enferma y los demás se sienten desatendidos.
Problemas de conducta en los hijos
Los problemas de conducta pueden ocurrir en cualquier etapa aunque son más frecuentes durante la adolescencia. Los progenitores tenemos que ser capaces de ir modificando y ajustando las normas a medida que nuestros hijos crecen. Pero, a veces, no es tan sencillo. Por ejemplo, probablemente todos estaremos de acuerdo en no dejar salir solos a nuestros/as hijos/as cuando tienen dos años, pero ¿y a los 12? El problema habitualmente radica en que los cambios son tan sutiles y graduales que no es sencillo tomar decisiones o poner nuevas normas.
Por su parte, los hijos e hijas, a medida que crecen, exploran los límites, intentan imponer su criterio, rebaten… y está bien que así lo hagan. Sin embargo, en el otro lado, tienen que encontrar unos progenitores comprensivos pero firmes, flexibles pero coherentes. Cuando esto no sucede, es adecuado buscar ayuda en un terapeuta familiar.
Problemas escolares
Cuando un niño tiene problemas en la escuela, estos suelen extenderse al ámbito familiar. Cuestiones como las dificultades de aprendizaje o el acoso escolar deben ser tratadas por profesionales que puedan actuar en ambos ámbitos (familiar y escolar).
Estas que presentamos son solo algunas de las situaciones más frecuentes por las que acudir a terapia familiar. En ella encontraremos un profesional neutral que de forma objetiva y activa nos ayudará a resolver nuestros problemas. En cualquier caso, si observamos que un problema de cualquier naturaleza interfiere en el correcto desarrollo y evolución de la familia, no debemos dudar en consultar a un profesional cualificado.
Separaciones o divorcios conflictivos
Cuando los progenitores no son capaces de llegar a acuerdos en cuanto a la crianza y educación de los niños o, cuando los niños sufren con la nueva situación, es importante acudir a terapia familiar para minimizar el impacto de la separación y que todos los miembros se puedan adaptar al cambio de la mejor manera posible.
Familias reconstituidas
A veces, tras un divorcio o separación, los progenitores encuentran nuevas parejas que, a su vez, pueden tener hijos/as. Así, se forman nuevas familias que llamamos reconstituidas. Reajustar las dinámicas familiares en estos casos es importante para que los niños y niñas acepten y se adapten al nuevo formato familiar y no rechacen a los nuevos miembros.
Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional, en la Tribu CSC puedes consultar a nuestro equipo de expertos en psicología materno-infantil, crianza y educación respetuosas.
Podéis descargar gratis la app de Criar con Sentido Común tanto para Apple como para Android, y tenéis una semana gratis para probar todas las ventajas de la membresía a la Tribu, realizar todos los cursos online disponibles y consultar a nuestros/as especialistas.
0 responses on "Terapia familiar: ¿En qué casos es recomendable?"