Juguetes para peques con capacidades diversas

Los juguetes son una herramienta imprescindible para el desarrollo de todos los peques, pero aún más para aquellos con diversidad funcional o intelectual. No obstante, el 36% de las familias con hijos/as con capacidades diferentes encuentra difícil encontrar juguetes adaptados. Aquí os proponemos sugerencias de juego y juguetes para niños con diversidad funcional.

No en vano, a pesar de la dificultad de las familias para encontrar materiales adecuados para sus peques, las cifras nos indican que en la actualidad en España hay más de 60.000 niños y niñas de 0 a 6 años con algún tipo de diversidad funcional y para ellos el juego y los juguetes son herramienta imprescindible para su desarrollo e inclusión.

El juego, una necesidad de todos los niños y niñas, aún más necesario para la integración y el desarrollo en casos de diversidad física o intelectual

En 2016, el Instituto Tecnológico del Producto Infantil y Ocio (AIJU) publicaba una guía que incluía el estudio Juego, Juguetes y Diversidad en España en el que participaron 500 familias. Aunque el 90% de las familias con peques con diversidad funcional consideraba que los juguetes contribuían a su integración, el 36% de las familias con hijos con capacidades diferentes recalcaba que les resultaba difícil encontrar juguetes para niños con diversidad funcional.

El estudio reflejaba también que mientras el 60% de los niños comparte el juego con otros de diferentes culturas en parques y colegios, solamente el 40% de los niños y niñas jugaba con menores con algún tipo de discapacidad.

Asimismo, entre 2007 y 2017, AIJU, en colaboración con ONCE Y CEAPAT analizaron 2.866 juegos y juguetes del mercado, llegando a los siguientes resultados:

• Tan solo un 21% de los juguetes son manejables por parte de niños con discapacidades motoras.
• Un 44% lo son por peques con discapacidades visuales.
• Un 86% por niños con discapacidades auditivas, sin ningún tipo de adaptaciones o ayuda externa para jugar.
• Tan solo un 5% de ellos son accesibles para las tres discapacidades simultáneamente.

Por su parte, la Guía del Juguete Educativo, editada por Cruz Roja, resalta que «el juego es una herramienta de experimentación universal, incluyendo a los niños y las niñas con diversidad funcional (motora, visual, auditiva y/o intelectual)» y añade que compartir momentos de juego y juguetes con otros niños de su edad “es fundamental para el desarrollo y la vivencia del juego del niño”. Cruz Roja explica también que cuando los juguetes no pueden ser utilizados tal y como se comercializan porque son incompatibles con la diversidad funcional del niño, es necesario adaptarlo o que el peque cuente con la ayuda de terceras personas.

Asimismo, los expertos en terapia ocupacional recuerdan que cuando existe algún tipo de diversidad es necesario estimular el desarrollo en éste área y en este sentido, el juego es la mejor herramienta para favorecer el desarrollo integral de la infancia.

¿Cómo aprenden los niños con capacidades diferentes?

Los niños y niñas con diversidad funcional tienen el derecho de tener las mismas oportunidades de aprendizaje, interacción y crecimiento en el hogar y en el aula. En concreto, el entorno educativo ha de ser un espacio social para que todos los niños y niñas puedan desarrollar su personalidad y aprendan a convivir entre ellos, sin limitaciones.

¿Cómo aprenden los niños con discapacidad intelectual? ¿Y física?

Los peques con discapacidad intelectual pueden necesitar más tiempo para aprender a hablar, caminar, aprender destrezas y alcanzar hitos del desarrollo (como gatear, ponerse en pie, leer y escribir, vestirse o comer solos, etc.). Suelen presentar más propensión a presentar dificultades de aprendizaje en la escuela. No obstante, sí que aprenderán, solo que necesitarán más tiempo.

Por su parte, los pequeños y pequeñas con diversidad motora pueden presentar dificultades para su desarrollo motor, viéndose este afectado en según qué áreas específicas, relacionadas con su discapacidad.

En cualquier caso, en todos estos casos es necesario ofrecerles materiales de juego acordes a sus capacidades, para que puedan desarrollarse y disfrutar exactamente igual que todos los demás peques.

Juguetes para niños con diversidad funcional: ¿Qué tipos de juegos existen para personas con diversas capacidades?

A menudo, adaptar las actividades lúdicas a niños y niñas con diversidad funcional solo precisa modificar las formas, complejidad, objetivos o reglas de juego para que puedan participar. Asimismo, la adaptación de actividades y juegos para peques con diversidad funcional es estimulante y básico para su desarrollo físico y mental.

Si es preciso, también se deben adaptar los materiales de juego. ¿Qué son los juguetes adaptados? Se consideran juguetes adaptados aquellos juguetes estándar a los que se les ha hecho alguna modificación física que facilita su uso y el juego.

En cualquier caso, tener diversidad funcional no debe impedir a los peques poder participar en juegos o actividades con otros menores. Los juegos y juguetes les proporcionan un medio de participación e interacción con su entorno y les ayuda a tener momentos agradables en sus ratos libres, aumentando su bienestar y fomentando su aprendizaje.

No obstante, es recomendable pedir consejo a un especialista para que pueda orientarnos sobre las actividades y tipos de juguetes que mejor puedan funcionar dependiendo del tipo y grado de diversidad funcional del niño o la niña. Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa.

Características de los juguetes en función del tipo de necesidad

Estas son las características físicas que, según los especialistas en desarrollo infantil, han de tener los materiales de juego en función de las necesidades de los peques con algún tipo de diversidad funcional (auditiva, visual, motora o intelectual):

• En el caso de la diversidad funcional auditiva, se requiere que los mecanismos orales de los juguetes se acompañen de una transcripción, explicaciones gráficas o escritas fáciles de comprender y sistemas de control de volumen para adecuarlo al nivel auditivo, así como disponer de entrada opcional para auriculares.
• Por su parte, y debido a que la falta de visión puede provocar una falta de motivación a la hora de utilizar algunos objetos, es preciso que el juego o juguete tenga efectos sensoriales, realistas y reconocibles; que se utilicen colores vivos y los componentes deben ser fácilmente identificables mediante el tacto.
• La capacidad motora ha de tenerse en cuenta tanto para valorar las habilidades como la capacidad de desplazamiento. En estos casos el juguete debe ser fácil de manipular, y que sus elementos han de facilitar que se pueda coger, presionar, activar… En los casos más severos se requieren diseños con formas que ofrezcan múltiples áreas para su agarre y sus componentes deben ser sencillos de ensamblar.
• Por último, para la diversidad funcional intelectual se deben seleccionar aquellos juguetes que estimulan las habilidades cognitivas o intelectuales como la atención, la memoria y el refuerzo hábitos de autonomía personal.
• Las características que debe aunar un juguete para un pequeño con autismo, dependerán mucho de las habilidades concretas del propio niño o niña pero, en general, nuestra experta nos indica: «cuando son más pequeñitos buscaremos objetos que proporcionen la información sensorial que disfrutan y les ayuda a organizarse (algunos prefieren morder, otros apretar, hacer sonar, que tengan luces, o que les permitan moverse). Elementos sencillos de manipular y que potencien habilidades motrices finas y de autonomía. También se debe favorecer los juegos de turnos y el compartir, que son muy adecuados».

¿Qué juguetes se pueden regalar a un niño con diversidad funcional?

Educar en diversidad al resto de niños, también es una necesidad

Necesitamos juguetes que muestren la discapacidad y ayuden a normalizarla desde la infancia. Para ello, es necesario ofrecer a nuestros hijos e hijas juegos y juguetes para educar en la diversidad. Para ello, es necesario que las familias y los centros educativos apuesten por juguetes inclusivos.

Los niños y niñas neurotípicos y/o sin diversidad funcional también necesitan juguetes que muestren otras realidades y ayuden a normalizarlas desde la infancia. Educar en la diversidad a nuestros hijos e hijas es una buena manera de contribuir con nuestro granito de arena para cambiar el mundo, invirtiendo en una sociedad futura más justa e igualitaria. Una sociedad, en definitiva, mejor.

Un niño o niña tolerante ha aprendido a respetar a otros niños y niñas y relacionarse con ellos sin tener preferencias (de género, raza, características físicas o cognitivas) y con independencia de lo muy parecidos o diferentes que sean de ellos mismos. La educación en valores es, en definitiva, fundamental para inculcar el respeto hacia los demás y la tolerancia. La falta de tolerancia y respeto da lugar a problemas como las burlas e incluso el bullying.