Muchas veces vivimos situaciones con nuestros peques que nos “sacan de nuestras casillas”, nos alteramos porque nos desbordan sus reacciones o explosiones emocionales y quisiéramos que se comportasen de otro modo, pero en realidad lo…
Un equipo de investigación en neurodesarrollo de la Universidad de Texas en Dallas ha descubierto algunas de las pruebas más concluyentes hasta el momento de que los progenitores que hablan más con sus bebés mejoran su desarrollo cerebral.
La Dra. Meghan Swanson, profesora asistente de psicología en la Escuela de Ciencias del Comportamiento y del Cerebro, es la autora principal del estudio, publicado en la revista ‘Developmental Cognitive Neuroscience’.
Los investigadores utilizaron resonancias magnéticas y grabaciones de audio para demostrar que el habla del cuidador está asociada con el desarrollo del cerebro infantil de manera que mejora el progreso del lenguaje a largo plazo.
La investigación incluyó a 52 bebés del Estudio de Imágenes Cerebrales Infantiles (IBIS, por sus siglas en inglés), un proyecto del Centro de Excelencia para el Autismo de los Institutos Nacionales de Salud que involucra ocho universidades en los EE.UU. y Canadá y sitios clínicos en Seattle, Filadelfia, St. Louis, Minneapolis y Chapel Hill, Carolina del Norte. Las grabaciones del idioma del hogar se recopilaron cuando los niños tenían 9 meses y nuevamente 6 meses después, y las resonancias magnéticas se realizaron a los 3 meses y 6 meses, y a las edades de 1 y 2 años.
«Se eligió este momento de grabaciones caseras porque se extiende a ambos lados del surgimiento de las palabras», explica Swanson. «Queríamos capturar tanto este marco de tiempo prelingüístico y de balbuceo como un punto posterior o cercano al surgimiento del habla«.
Los bebés que escuchan más palabras tienen mejores habilidades lingüísticas
El reciente estudio «es un paso hacia la comprensión de por qué los niños que escuchan más palabras tienen mejores habilidades lingüísticas y qué proceso facilita ese mecanismo», dijo Swanson. «El nuestro es uno de los 2 nuevos artículos que son los primeros en mostrar vínculos entre el habla del cuidador y cómo se desarrolla la materia blanca del cerebro«.
La materia blanca en el cerebro facilita la comunicación entre varias regiones de materia gris, donde se lleva a cabo el procesamiento de la información en el cerebro. Asimismo, hace tiempo que se sabe que el entorno del hogar de un bebé, especialmente la calidad del habla del cuidador, influye directamente en la adquisición del lenguaje, pero los mecanismos detrás de esto no están claros.
El equipo de Swanson tomó imágenes de varias áreas de la materia blanca del cerebro, enfocándose en desarrollar vías neurológicas. «El fascículo arqueado es el tracto de fibra que todos aprenden en los cursos de neurobiología y es esencial para producir y comprender el lenguaje, pero ese hallazgo se basa en cerebros adultos», detalla Swanson. «En estos niños, también observamos otros tractos de fibra potencialmente significativos, incluido el fascículo uncinado, que se ha relacionado con el aprendizaje y la memoria«.
Los investigadores utilizaron las imágenes para medir la anisotropía fraccional (FA). Esta métrica para la libertad o restricción del movimiento del agua en el cerebro se utiliza como indicador del progreso del desarrollo de la materia blanca. «A medida que madura una pista de fibra, el movimiento del agua se vuelve más restringido y la estructura del cerebro se vuelve más coherente», explica Swanson. «Debido a que los bebés no nacen con cerebros altamente especializados, uno podría esperar que las redes que respaldan una determinada habilidad cognitiva comiencen siendo más difusas y luego se vuelvan más especializadas«.
El equipo de Swanson descubrió que los bebés que escuchaban más palabras tenían valores de FA más bajos, lo que indica que la estructura de su materia blanca se desarrollaba más lentamente. Los niños pasaron a tener un mejor desempeño lingüístico cuando comenzaron a hablar. Los resultados del estudio se alinean con otras investigaciones recientes que muestran que una maduración más lenta de la materia blanca confiere una ventaja cognitiva.
«A medida que el cerebro madura, se vuelve menos plástico: las redes se establecen en su lugar. Pero desde un punto de vista neurobiológico, la infancia es diferente a cualquier otra época. El cerebro de un bebé parece depender de un período prolongado de plasticidad para aprender ciertas habilidades«, dijo Swanson.
Según incide la experta, los resultados de su estudio «muestran una asociación negativa clara y llamativa entre la FA y la vocalización infantil«.
Sharnya Govindaraj, coautora del artículo, estudiante de doctorado en cognición y neurociencia y miembro del ‘Baby Brain Lab’ de Swanson, dijo que al principio estaba sorprendida por los resultados.
«Inicialmente no sabíamos cómo interpretar estas asociaciones negativas que parecían muy contrarias a la intuición. Todo el concepto de neuroplasticidad y la absorción de nuevos conocimientos tenían que encajar» –dijo– «Qué habilidad estamos viendo también es muy importante, porque algo como la visión madura mucho antes que el lenguaje«.
Como madre de un niño pequeño en un hogar bilingüe, Swanson tenía curiosidad acerca de cómo funciona esta relación para los bebés expuestos a más de un idioma. «Al criar a una niña bilingüe, es notable cómo no se confunde con los idiomas y sabe con quién puede usar qué idioma», dijo Swanson.
El cerebro infantil: «Los padres tienen el poder de ayudar a sus hijos a desarrollarse»
Cuando las familias participantes en el estudio de Swanson se registran, la especialista les solicita «que se comprometan por un año y medio», tal y como ella detalla. «Debido al compromiso de todos los progenitores en estudios previos, tenemos el conocimiento que nos permite comunicarnos con nuestros hijos de una manera que apoya su desarrollo«.
Swanson incide en que el mensaje final es que los padres tienen el poder de ayudar a sus hijos a desarrollarse. «Este trabajo destaca a los progenitores como agentes de cambio en la vida de sus hijos, con el potencial de tener enormes efectos protectores«, dijo Swanson. «Espero que nuestro trabajo capacite a los padres con el conocimiento y las habilidades para apoyar a sus hijos lo mejor que puedan».
¿Cómo se desarrolla el cerebro infantil? ¿Cómo funciona el cerebro humano infantil? ¿Cómo es el desarrollo del cerebro en la infancia? ¿Cuándo empieza y cuándo termina el desarrollo del cerebro infantil? ¿Cuándo se termina de desarrollar el cerebro de los niños? Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional sobre el desarrollo de tus peques, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la terapeuta ocupacional pediátrica experta en desarrollo infantil Jéssica Romero y la docente, psicóloga y logopeda infantil Elena Mesonero.
0 responses on "Los investigadores ilustran cómo el habla del cuidador da forma al cerebro infantil"