El piel con piel con bebés prematuros puede reducir su mortalidad un tercio

Un nuevo estudio ha revelado que realizar piel con piel con bebés prematuros y/o de bajo peso al nacer puede llegar a reducir la mortalidad un 33%, así como el riesgo de infecciones en un 15%.

Además, según los investigadores, realizar piel con piel al menos 8 horas al día tras las primeras 24 horas de vida contribuye a que sea aún más efectivo para reducir la mortalidad y la infección.

Estudios anteriores evidencian que el contacto físico entre madre y bebé disminuye hasta un 50% la mortalidad infantil.

Realizar piel con piel reduce la mortalidad de prematuros un 33%

Si los beneficios de realizar piel con piel con un bebé recién nacido son numerosos tras un embarazo y parto que transcurren con normalidad, lo es aún más en el caso de los bebés prematuros o de bajo peso al nacer. Así lo ha puesto de manifiesto un nuevo estudio publicado en la revista BMJ Global Health, en el que explican que poner al bebé sobre el pecho de su madre (o el otro/a progenitor/a) en las primeras 24 horas de vida puede llegar a reducir la mortalidad en un 33%, así como el riesgo de contraer una infección.

Ya la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda desde hace años el método madre canguro como el «cuidado estándar para los bebés prematuros o con bajo peso al nacer después de recibir la atención hospitalaria que necesiten». Así, en su «Informe de Acción Global sobre Nacimientos Prematuros» explica que el 75% de las muertes en prematuros se podrían prevenir con medidas tan sencillas, poco costosas y naturales como practicar piel con piel.

Sin embargo, a pesar de que se conocen los beneficios de realizar piel con piel con prematuros, no había consenso sobre el momento en el que se podía empezar a realizar piel con piel con estos bebés con un estado de salud más crítico.

Ante ello, un grupo de investigadores de la India analizaron 31 ensayos que incluían a 15.559 bebés. De los 31 estudios, 27 compararon el método madre canguro con la atención tradicional, mientras que los 4 restantes compararon el inicio temprano con inicio tardío del contacto piel con piel.

Los resultados no dejan lugar a dudas: en comparación con la atención tradicional, el método madre canguro disminuyó el riesgo de mortalidad en un 33% durante la hospitalización tras el parto o en los 28 días después del nacimiento, mientras que el riesgo de infección grave como sepsis, disminuyó en un 15%.

La mortalidad disminuyó también en función de la duración diaria del contacto piel con piel entre mamá y bebé. Así, se observó menos riesgo cuando este duró al menos 8 horas al día en comparación con otros periodos diarios más cortos. También es mejor el inicio del piel con piel temprano que el tardío.

Entre los hallazgos más llamativos destaca el hecho de que la disminución de la mortalidad es independiente de su edad gestacional y el peso al nacer.

Según los investigadores, el estudio conlleva ciertas limitaciones ya que los participantes conocían la intervención y esta pudo influir en los resultados. Además, los recién nacidos con muy bajo peso, extremadamente prematuros o muy inestables no se incluyeron en los estudios.

«La investigación futura debe centrarse en superar las barreras y los facilitadores para la implementación a gran escala del método madre canguro en instalaciones y entornos comunitarios. También se necesitan datos sobre los resultados del desarrollo neurológico a largo plazo», concluyen los científicos.

¿Qué es el método madre canguro?

El método madre canguro no es más que el periodo de adaptación del bebé tras su nacimiento, tanto para los bebés sanos nacidos a término como para los que no han tenido un comienzo fácil, como los prematuros, los que nacen con bajo peso o padecen alguna patología.

Consiste en colocar al bebé boca abajo en el pecho de su madre (o el otro/a progenitor/a) sin más prenda que el pañal, mientras que el adulto también debe ir sin ropa.

El término método canguro apareció por primera vez en los años 70 de la mano de Peter de Chateau, quien escribió sobre el contacto madre-hijo. Posteriormente, en un trabajo escrito por Thomson en 1979 y en el que se mencionaba a Chateau apareció el término piel con piel. En 1978 en Colombia se implementó el método madre canguro de la mano del neonatólogo Edgar Rey Sanabria.

A pesar de que hoy sus beneficios son reconocidos por todo el mundo, al principio tardó varios años en reconocerse como una forma de estabilizar a los bebés.

Beneficios del método madre canguro

Tras el parto, el bebé pasa de un medio seguro a un mundo completamente desconocido y hostil. Por ello, el regazo de su mamá es el único sitio seguro para encontrar la calma que necesitan. Pero, además, realizar piel con piel con el bebé tiene múltiples beneficios:

• Les ayuda a regular la temperatura. El recién nacido no es capaz de regular la temperatura por sí mismo, pero el pecho de papá o mamá aumenta la temperatura 1 o 2 grados para convertirse en un lugar cálido.
• El bebé estabiliza sus constantes vitales.
• En el pecho de su progenitor/a deja de estar alerta y, por tanto, de generar cortisol, lo que le permite centrarse en su desarrollo.
• Relacionada con la anterior, al gastar menos energía en preocuparse, aumenta más rápidamente de peso.
• Disminuye la presencia de apneas causadas normalmente por la inmadurez de los pulmones.
• Mejora el sistema inmune del bebé y le protege de posibles infecciones.
• A nivel emocional, permite ofrecerle afecto, caricias y muestras de amor. Si se niegan estas atenciones, su cerebro disminuye y deja de realizar conexiones neuronales, lo que a su vez puede conllevar problemas de autoestima en el futuro o complicaciones cognitivas.
• En cuanto a la madre, tener a su bebé piel con piel le ayuda al equilibrio hormonal tras el parto, además de darle confianza ante la nueva situación y empoderarle.
• Para el otro progenitor, practicar piel con piel hace que genere oxitocina y, a medida que pasa el tiempo, se activan diferentes áreas del cerebro relacionadas con la motivación y la recompensa, además de aumentar su materia gris y la plasticidad.
• Favorece la lactancia materna ya que el bebé tiene el pecho a su disposición todo el tiempo.
• Ayuda a establecer el vínculo, algo fundamental para su desarrollo saludable.

¿Cómo realizar piel con piel con bebés prematuros?

Realizar el método madre canguro con un bebé prematuro puede ser algo más complicado que con un bebé nacido a término ya que, por lo general, suelen ser más pequeños. Por ello, es importante que tengas especial cuidado al cogerle y que lo hagas con movimientos suaves pero seguros.

Lo ideal es que lo coloques en posición vertical, aunque el personal sanitario te ayudará a escoger la mejor postura para ambos, especialmente si tiene sondas. Y, sobre todo, disfruta del momento. Quizás no es como esperabas, pero puedes hablarle, acariciarle y ayudarle a encontrar la calma que necesita.

El porteo ergonómico del bebé es un método práctico y eficaz que favorece el piel con piel, el desarrollo del bebé, la lactancia materna y el apego seguro con el recién nacido. Se puede practicar desde el nacimiento, siempre bajo las instrucciones de un/a experto/a. En la Tribu CSC puedes consultar online a la experta en porteo y seguridad infantil, María Arenzana, quien te puede instruir sobre las claves del porteo seguro y ayudarte a elegir el mejor portabebés según vuestras circunstancias y características personales, las de la mamá y las del bebé.

Si tienes un bebé prematuro, en la Tribu CSC también cuentas con todo un equipo de profesionales para resolver cualquier duda que tengas online. Entre ellos, la pediatra Gloria Colli, el enfermero de Pediatría Armando Bastida o la terapeuta ocupacional pediátrica y experta en desarrollo infantil, Jéssica Romero.