Buscar un bebé suele ser una aventura divertida y feliz. Pero si el embarazo tarda en llegar puede generar mucho estrés en la mujer y en la pareja. Estrés y fertilidad no se llevan bien.…
El estrés pandémico afectó a la placenta de las mujeres que se quedaron embarazadas en esa etapa. Lo demuestra un estudio reciente realizado en Estados Unidos. Es una prueba más de cómo la salud mental de las mujeres embarazadas tiene un impacto clave en la gestación.
Estrés pandémico y placenta: ¿Qué pasa si una embarazada tiene mucho estrés?
Además de una crisis de salud a nivel mundial, la pandemia del Covid-19 también se convirtió en un problema de salud mental afectando a personas de todas las edades, incluidos niños y adolescentes.
Si un embarazo y un postparto ya puede suponer una etapa de estrés y de ansiedad en una mujer, vivir estas situaciones en un escenario de pandemia, con grandes dosis de incertidumbre y miedo, lo hace bastante más complicado. Incluso antes de la pandemia, diversos estudios han demostrado que un nivel alto de estrés puede tener un impacto negativo en el embarazo y el parto.
Los desastres naturales, las hambrunas o los conflictos bélicos pueden provocar ansiedad perinatal, síntomas depresivos, parto prematuro, bajo peso al nacer y problemas cognitivos y de comportamiento en el caso del bebé.
Ahora, este nuevo estudio muestra además que ese estrés en el embarazo provoca cambios importantes en la placenta.
¿Qué afecta la salud de la placenta?
La placenta es el primer órgano fetal que se desarrolla en un embarazo. Está formada por células que se originan en el feto y que lo conectan con la pared del útero de la madre durante el embarazo. Ahí crecerá el futuro bebé a lo largo de la gestación. Está adherido al feto, dentro de la cavidad uterina, por el cordón umbilical.
Contiene una compleja red de vasos sanguíneos que permiten el intercambio de nutrientes y oxígeno entre la madre y el feto. También se encarga de eliminar los desechos del bebé. Además, actúa como barrera evitando que muchas sustancias nocivas que puedan entrar en la sangre de la mujer dañen al feto. Incluso se ha descubierto que protege al feto del coronavirus.
También actúa como un órgano endocrino produciendo varias hormonas importantes en el embarazo. Por un lado, controla el crecimiento y desarrollo de la placenta y el feto; y por otro, actúa sobre la madre para apoyarla en el embarazo y prepararla para el parto.
¿Cómo afecta el estrés y la ansiedad en el embarazo?
La placenta actúa de barrera frente a elementos externos, pero no siempre puede evitar que estos lleguen al feto. Por ejemplo, el alcohol sí atraviesa esa barrera. También el cortisol atraviesa la placenta.
El cortisol, también llamada la hormona del estrés, es una hormona esteroide que ayuda al cuerpo a responder al estrés. Esta hormona puede ser positiva. Algunos estudios la relacionan con un desarrollo más temprano del lenguaje en bebés. Sin embargo, el estrés y la ansiedad en el embarazo alteran «diversas hormonas y neurotransmisores», tal y explica la psicóloga perinatal de CSC Mamen Bueno:
«Si bien la placenta actúa como barrera protectora para el feto, el cortisol en exceso puede traspasarla y tener un efecto neurotóxico para el feto, provocando respuestas metabólicas similares a las de una persona adulta. Se ha estudiado que mujeres con elevados niveles de ansiedad y estrés tienen mayor riesgo de aborto espontáneo, parto prematuro o un parto más instrumentalizado«.
Neurodesarrollo fetal
«Los niveles elevados de cortisol en el feto también son capaces de modificar el desarrollo de algunos órganos del bebé, incluido el cerebro«, explica en este artículo el profesor de la Universidad de Granada Rafael A. Caparros-González.
Algunos estudios citados por este experto demuestran que un nivel excesivo de cortisol puede hacer que el bebé tenga menos capacidad de aprender a hablar o a caminar.
«Además, existen otras vías por las que el estrés materno puede llegar al feto en desarrollo. Sabemos que altos niveles de estrés psicológico durante el embarazo van a producir cambios en la maduración del cerebro por medio de modificaciones en algunos neurotransmisores como la serotonina, dopamina o noradrenalina«.
Uno de los mecanismos que subyace en muchas de estas consecuencias se debe precisamente a la «disfunción placentaria», según las autoras de la investigación estadounidense.
«La placenta es la principal interfaz entre la madre y el feto y desempeña un papel importante en la nutrición, la excreción de toxinas, la inmunidad y el metabolismo. Es susceptible a un ambiente uterino hostil que conduce a alteraciones en la función y el desarrollo de la placenta«.
El estudio se dio a conocer en mayo de 2023 y ha sido liderado por el Instituto de Desarrollo Cerebral del Children’s National Hospital.
Impacto del estrés pandémico en la placenta
El objetivo del estudio del Children’s National Hospital era determinar si el estrés pandémico tenía relación con cambios en la placenta. Es decir, si había impactado de algún modo en el desarrollo placentario. Para ello, las investigadoras optaron por analizar la placenta en vivo de 63 mujeres embarazadas en la pandemia mediante resonancia magnética avanzada.
Estas imágenes se compararon con las de 165 mujeres que se habían quedado embarazadas antes de marzo de 2020. Además, se sometieron a cuestionarios para evaluar el grado de estrés y depresión maternal. El primer grupo, las embarazadas durante la pandemia, obtuvieron puntuaciones «significativamente más altas» que las del otro grupo.
Los resultados demostraron que la placenta de las embarazadas durante la pandemia cambió, tanto en estructura, como textura y otras cualidades como la asimetría o uniformidad. Los cambios en el desarrollo placentario también se asociaron con el peso del bebé al nacer.
Es decir, que estos cambios en aspectos clave de la placenta están relacionados de algún modo con el estrés materno y los síntomas de depresión.
Estrés pandémico y placenta: «Es esencial seguir investigando»
Catherine Limperopoulos es directora del Instituto de Desarrollo Cerebral y lidera este estudio. Para ella, la pandemia expuso a las futuras madres a una «letanía de factores estresantes negativos» como el distanciamiento social, el miedo a morir o la inseguridad financiera.
«Ahora sabemos que este órgano vital (la placenta) cambió para muchas madres y es esencial que sigamos investigando el impacto que esto pudo haber tenido en los niños que nacieron durante esta crisis mundial de salud pública«.
De hecho, actualmente este centro de investigación está realizando un seguimiento «para determinar la importancia funcional a largo plazo de estos cambios placentarios en el útero«.
Esta experta remarca que cuando se detecta de manera precoz, «el estrés materno es un factor de riesgo modificable que puede tratarse con psicoterapia, apoyo social y otras intervenciones personalizadas basadas en evidencia».
Estrés en el embarazo: Síntomas
El estrés pandémico cambió la placenta, según este estudio. Pero el estrés excesivo, incluso en circunstancias no excepcionales, tiene impacto en el embarazo y en el futuro bebé, como demuestra este estudio en el que participaron 65 millones de mujeres.
Algunos de los síntomas del estrés en el embarazo son físicos. Por ejemplo, palpitaciones, opresión en el pecho, dolor de cabeza o fatiga. Otros son también emocionales: cambios de humor repentinos, apatía, tristeza, irritabilidad o sentimientos de culpabilidad.
Otras señales pueden ser falta de concentración e incapacidad de prestar atención a lo que sucede alrededor. También la persistencia de pensamientos negativos o preocupaciones excesivas por cualquier cosa.
Si estás embarazada y sientes este tipo de síntomas, debes consultar con profesionales de la salud. En Criar Con Sentido Común tienen a tu disposición profesionales muy cualificadas como la psicóloga perinatal Mamen Bueno o la matrona Sara Caamaño. Están disponibles para consultas online a través de la Tribu CSC.
¿Qué puedo hacer para disminuir el estrés?
Precisamente la psicóloga Mamen Bueno nos da algunas recomendaciones al respecto:
- Lo primero es tener en cuenta la ansiedad y no desdeñarla.
- Delegar lo más posible y no sobrecargarte de tareas.
- Tómate tiempo para ti. Para hacer actividades que te resulten gratificantes. Incluso no hacer nada.
- Pasear y hacer actividad física que te vaya bien y te guste. Ambas cosas ayudan a manejar el estrés.
- Rodéate de personas que te den afecto y a los que puedas recurrir para comentar tus preocupaciones.
Asimismo, busca apoyo en algún grupo de embarazadas con el que compartir inseguridades y experiencias. La Tribu de Criar con Sentido Común te puede ser muy útil en este sentido: además de entrar en contacto con otras madres y familias, podrás obtener el apoyo del equipo de profesionales en salud materno-infantil y crianza respetuosa.
Por último, si ves que no puedes regular la ansiedad, no tengas miedo a pedir ayuda profesional. En la Tribu CSC puedes consultar online a la psicóloga perinatal Mamen Bueno.
También te puede interesar...
-
¿Cómo afecta el estrés a la búsqueda del embarazo?
-
Un alto estrés en el embarazo puede afectar a toda la vida del bebé. Son las conclusiones de un estudio realizado con 65 millones de mujeres
Tras analizar la información de más de 65 millones de mujeres y sus bebés de diferentes países de Europa, América, Asia y Oceanía, un nuevo estudio concluye que el estrés en el embarazo influye tanto…
-
La crianza positiva ayuda a proteger del estrés en la niñez y la adolescencia, según un nuevo estudio
La crianza positiva -cálida, cariñosa y empática- puede amortiguar los efectos del estrés durante la niñez y la adolescencia. Es la conclusión clave de un estudio reciente, publicado en la revista 'PNAS Nexus'. Los investigadores…
-
¿Cómo afecta el estrés a la búsqueda del embarazo?
Buscar un bebé suele ser una aventura divertida y feliz. Pero si el embarazo tarda en llegar puede generar mucho estrés en la mujer y en la pareja. Estrés y fertilidad no se llevan bien.…
-
Ansiedad en el embarazo: ¿Le estoy pasando mi estrés al bebé?
Desde el momento que nos enteramos que estamos embarazadas entramos en una rueda de cuidados médicos puestos en marcha para cuidar de nosotras y nuestros bebés. Se nos monitorea la tensión, los niveles de glucosa,…
-
Alemania, el país donde las madres y padres estresados tienen derecho a 3 semanas de retiro
Alemania permite y promueve que madres y padres estresados puedan acudir a un retiro durante 21 días para solucionar sus problemas salud física y mental. Se trata de los conocidos como Kur. Este país cuenta…
Buscar
Nuestros Cursos
Lo más leído
- Beneficios de la lactancia nocturna
- Doctora, tiene un bultito en el pecho: ¿qué puede ser?
- Sanidad alerta sobre el alto contenido en mercurio de cuatro pescados y recomienda no dárselos a los niños hasta los 10 años
- Bebés de alta demanda: ¿cómo saber si tu hijo es uno de ellos?
- Esas madres y esos padres hippies que no saben lo que hacen
- Nuevo «Mi primer Danone» sin azúcares añadidos: por qué no lo recomendamos
Categorías
- Alimentación Complementaria
- Alimentación con fórmula
- Alimentación infantil
- Crianza Respetuosa
- Desarrollo infantil
- Educación Emocional
- Educación infantil
- Educación Sexual
- Embarazo
- Familias con animales
- Fertilidad
- Juego y juguetes
- Lactancia materna
- Literatura infantil
- Manualidades
- Maternidad y paternidad
- Parto
- Pedagogía Montessori
- Planes en Familia
- Porteo Infantil
- Posparto
- Psicología Infantil
- Recién nacido
- Salud de los Progenitores
- Salud infantil
- Segunda infancia y adolescencia
- Seguridad en el coche
- Seguridad Infantil
- Sueño infantil
- Uncategorized
Entradas recientes
- ¿Qué se le puede regalar a un niño en Navidad?
- 11 Cuentos para regalar a los más peques de la casa
- ¿Cómo elegir los juguetes más seguros y adecuados para nuestros peques? Juguetes: Decálogo de seguridad
- Juegos de mesa (I) para bebés de 12 y 24 meses
- Materiales Reggio Emilia para niños: Estas Navidades, regala luz
0 responses on "Un estudio encuentra que el estrés pandémico ha remodelado la placenta de las futuras mamás"