¿Queréis salir a comer o cenar fuera de casa y no sabéis qué pedir para el peque? ¿Os vais de vacaciones y no sabéis cómo os las vais a arreglar para dar de comer a…
Viajar con niños es una experiencia familiar única. Sin embargo, en ocasiones puede llegar a estresar un poco. Por eso, es fundamental seguir una serie de recomendaciones para organizar un viaje en familia y disfrutarlo.
¿Cómo organizar un viaje con la familia?
La llegada del verano trae consigo las vacaciones y, en muchos casos, los viajes. Pero estos se pueden «complicar» un poco cuando tenemos peques. Por ello, hay que tener en cuenta una serie de tips que pueden resultar muy útiles para viajar con toda la familia y, lo que es mejor, disfrutarlo.
1. Adapta expectativas y elige un destino acorde a los peques
Más lejos no siempre implica mejor. Y aunque sobre el papel puede resultar muy tentador ir a una playa paradisíaca, hay que valorar si de verdad merece la pena pasar varias horas en un avión con niños pequeños.
Por ello, lo mejor es usar el sentido común y la coherencia y posponer de momento viajes a países exóticos o con experiencias incompatibles con un bebé. Así que párate a pensar qué tipo de viaje y estancia encaja con vuestras necesidades actuales con un bebé o un niño (o varios) pequeño en casa.
Si finalmente optas por el avión, lo ideal es llegar con tiempo suficiente al aeropuerto y después de haber comido y descansado bien. A veces, coger vuelos nocturnos con la esperanza de que duerman no es buena idea porque la experiencia en sí de montarse en un avión puede más que el sueño.
2. Lleva solo lo imprescindible
Viajar con bebés conlleva llevar muchos bultos, así que trata de escoger solo lo imprescindible y deja en casa todo lo que puedes comprar/alquilar en el destino. Por ejemplo, puedes renunciar a llevar pañales y toallitas o la leche de fórmula. Si el peque duerme con vosotros en casa o te ponen una cuna en el alojamiento, no será necesario llevarla.
En cuanto a la ropa, trata de vencer los «por si» (si se mancha, si hace frío, si hace calor). Consulta el tiempo que hará en tu destino para elegir la ropa adecuada y si hay lavadora en el alojamiento. No olvides el botiquín infantil de viaje ni las recetas y/o los informes médicos.
3. El viaje
Recuerda tener materiales de entretenimiento para el viaje. Incluso si el trayecto es corto ya que si los peques se aburren pueden convertirlo en muy largo. Es importante dosificar los juguetes y no mostrarlos todos a la vez. De hecho, una buena idea es aprovechar la euforia inicial para mantenerlos entretenidos un buen rato, explicándoles dónde vamos o qué vamos a hacer.
4. Ten todo lo necesario a mano
Prepara una bolsa con todo lo imprescindible: pañales, toallitas, ropa para cambiarlos en caso de que se manchen… Así, en caso de ser necesario, no tendrás que abrir las maletas grandes y buscar en ellas. Eso sí, es importante que esta bolsa vaya en el maletero y no en los asientos suelta ya que en caso de colisión, puede ser peligrosa.
5. Para las veces que sean necesarias
Lo importante es llegar, no cuándo. Y para los peques un viaje en coche puede ser muy largo. Así que procura parar cada poco tiempo para estirar las piernas y que jueguen un rato. Y recuerda que si es un bebé, deberás parar al menos cada hora y media para reducir el riesgo de asfixia postural.
¿Tienen hambre? En vacaciones los horarios se relajan, así que si hemos alterado las horas de comidas y te piden algo de comer, no dudes en ofrecérselo. Eso sí, es importante que nunca le des comida en el coche ya que aumenta el riesgo de atragantamiento.
6. Mantén las rutinas en la medida de lo posible
Las rutinas son clave para los peques ya que les dan seguridad y les hacen sentir tranquilos. Algo, que en un sitio nuevo y con las emociones del viaje pueden perder de alguna forma. Por ello, una vez en destino es importante tratar de respetar sus ritmos, horarios y hábitos en la medida de lo posible.
7. Organiza todo al detalle
Cuanto más organizado esté el viaje, menos margen hay para sorpresas desagradables. Lo ideal es tener todas las reservas y entradas compradas antes de salir de casa.
8. Escoge un alojamiento familiar
Si viajas con peques, puedes optar por casas rurales, apartamentos o complejos hoteleros con zonas de ocio, piscina y actividades infantiles. Es probable que paséis bastante tiempo en el alojamiento y quizás una habitación de hotel es algo incómoda para pasar muchas horas con niños.
9. Sentido común y empatía
Puede que cuando viajabas sin niños, recorrieras las nuevas ciudades sin descanso. Pero, al hacerlo con peques, es necesario cambiar el chip y adaptarnos a ellos y a sus necesidades. La idea es crear nuevos recuerdos y reforzar nuestro vínculo afectivo, y no comparar con las vacaciones de hace años cuando nadie dependía de ti.
Así que usa el sentido común y trata de empatizar con los peques. Sus gustos y necesidades son diferentes a las de los adultos y, por ello, debemos tenerlos siempre en cuenta. Puede que algo tan sencillo, marque por completo la diferencia del viaje y nos haga disfrutar y descansar a todos.
¿Qué se debe tener en cuenta al viajar? ¿Cuáles son los consejos que le dan a la familia? ¿Cómo disfrutar de unas vacaciones en familia? Si tienes peques y necesitas ayuda sobre cómo planificar tus vacaciones con ellos o tienes cualquier duda sobre salud infanto-juvenil, en la Tribu CSC cuentas con un equipo de expertos/as que pueden ayudarte a resolverlas. Entre ellos, se encuentra la experta en seguridad infantil y asesora d porteo María Arenzana, la pediatra Gloria Colli o el enfermero de Pediatría Armando Bastida.
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