A la hora de criar, ¿le haces más caso a tu corazón o a tu cabeza?

Este post se publicó originalmente el 12/03/2020 y ha sido actualizado en fecha 21/09/2024

Y podríamos añadir: ¿o a tus familiares y amigos? Nadie sabe mejor que tú y tu hijo lo que ambos necesitáis. De hecho, cualquier buen libro de crianza debería empezar con la frase «Confía en ti misma».No te dejes impresionar por las voces de los «expertos» familiares y amigos.  No tengas miedo. Tú sabes criar.

Confía en tu instinto. Tú sabes criar

Cada vez tenemos más miedos, nos preguntamos más veces: «¿Lo estaré haciendo bien?», «¿Seré mala madre por sentir X?». Y cada vez nos cuesta más parar la máquina, parar la cabeza y sentarnos al lado de nuestro hijo para mirarle y observar sus necesidades.

¡Hemos dejado de escuchar a nuestro instinto para seguir métodos de crianza que iban en contra de nuestra naturaleza! Por ejemplo:

«Debes dejar llorar a tu hijo»

¿Cuántas veces has oído que «hay que dejarles llorar» porque es bueno para los pulmones, porque te está intentando manipular, porque no puedes estar satisfaciendo todos sus deseos, etc.?

Estoy segura de que si un amigo llama a tu puerta llorando desconsolado porque tiene un problema, le haces pasar, le das un abrazo y te sientas a escucharle. Bien, entonces ¿por qué nos empeñamos en creer que está mal coger en brazos a nuestro hijo si llora?

Puede que a ti, adulto, su motivo te parezca poco; pero para él (que tiene un mundo más pequeño), su motivo es suficiente para que mamá o papá le abracen un rato y hablen con él. No tengas miedo, no se va a malcriar, al contrario: ¡lo estás criando muy bien! Le estás haciendo entender qué es la empatía y el amor.

«La comida tiene un horario»

No, eso que has oído tantas veces de que a los niños hay que darles el pecho cada dos horas y tienen que estar 10 minutos en cada pecho, NO ES VERDAD. No existen evidencias que digan que los niños necesitan comer de esa manera, con esos horarios. ¿O tú siempre tienes hambre a la misma hora?

No pregunto si comes siempre a la misma hora, porque eso es algo que nos hemos impuesto para poder llevar a cabo nuestras tareas sociales. Te pregunto si siempre tienes hambre a la misma hora. No, ¿verdad? Hay días que te levantas sin hambre y comerías dos horas después de haberte levantado, y días que devoras a cada hora.

Bien, pues a los bebés les pasa lo mismo y cuando eres madre, si escuchas a tu instinto, lo sabrás perfectamente. Cuando veas a tu bebé llorar, por arte de magia (más bien de instinto) sabrás que lo que tiene es hambre.

El colecho

¿Qué sientes cuando dejas a tu bebé durmiendo en su cuna y tú te vas a tu cama? Yo recuerdo que me insistían mucho en que no dejase dormir a mi primera hija con nosotros. Como padres primerizos que éramos, lo intentamos. A los dos meses cogimos a la pequeña y la dejamos en su cunita.

En ese momento, se me tensó todo el cuerpo, se me abrieron los ojos como platos y se me agudizó el oído. Estuve 10 minutos metida en la cama en un estado de alerta imposible para dormir… Así que me levanté, miré a mi compañero, y le dije: «yo así no voy a dormir nunca». La traje de vuelta a la cama y en ese momento lo tres respiramos aliviados y dormimos plácidamente.

Ahora ella tiene 6 años y hace dos que no quiere dormir con nosotros porque, solita, decidió que dormir a pata suelta en su cama le era más cómodo… Y tan feliz. En definitiva, los únicos expertos en VUESTRA crianza sois tú y tu hijo. Aunque seas madre primeriza te aseguro que tienes más conocimientos de los que crees, ¿sabes por qué?