Ricardo A. Mariscal, #SaludSinBulos: «Siguen siendo especialmente preocupantes los bulos relacionados con las vacunas, sobre todo en colectivos tan sensibles como los niños»

Combatir los bulos sobre vacunas a golpe de meme. Ese es el objetivo de la aplicación ‘El humor inmuniza’ desarrollada por un grupo multidisciplinar de la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (ANENVAC), en colaboración con el Instituto #SaludsinBulos y 360 médicos. Hoy hablamos con uno de los responsables de esta iniciativa, Ricardo A. Mariscal.

La mejor forma de combatir los bulos en salud infantil (y en general) es con información contrastada y actualizada. Ese es el lema de Criar Con Sentido Común, cuyo equipo atiende a diario a las familias de la Tribu CSC.

Pero nuestro equipo no está solo. Hay otros profesionales del ámbito sanitario que luchan contra el daño que provocan los bulos, que dejan desprotegidos a adultos y niños y siembran la desconfianza. Y ese es el objetivo de esta aplicación que lucha contra las fake news sobre vacunas con humor. Ricardo A. Mariscal es el responsable de Relaciones Institucionales de #SaludSinBulos.

P: ¿Por qué utilizar memes para alertar sobre los bulos en salud?

R: Los negacionistas y antivacunas llevan mucho tiempo usando los memes para propagar sus mentiras y viralizar en redes sociales. Debemos aprovechar la capacidad que tienen los memes de llegar a todo el mundo por su universalidad, sencillez y humor; para advertir sobre los bulos con evidencia científica y veracidad.

Debemos aprovechar la capacidad que tienen los memes de llegar a todo el mundo por su universalidad, sencillez y humor; para advertir sobre los bulos

P: ¿Y qué tipo de memes utilizáis?

R: Imágenes que sean comprensibles por toda la población con mensajes clave positivos y tratando de usar el humor con responsabilidad y rigor.

Hay que usar el humor con responsabilidad y rigor

P: ¿Cuáles son los bulos más habituales?

R: Durante la pandemia nos inundaron bulos de conspiraciones sobre el origen del coronavirus, remedios milagro y efectos secundarios inexistentes de las vacunas COVID. Pero los bulos de salud siempre han existido, no son un fenómeno reciente. Los más habituales tienen que ver con el uso de peligrosas pseudoterapias para enfermedades muy prevalentes, alertas falsas de alimentos e invenciones para perjudicar las campañas de vacunación.

Los bulos más habituales tienen que ver con el uso de peligrosas pseudoterapias para enfermedades muy prevalentes, alertas falsas de alimentos e invenciones para perjudicar las campañas de vacunación

P: ¿Y el más rocambolesco que os hayáis encontrado?

R: Los bulos de los terraplanistas siempre llaman mucho la atención y, sorprendentemente, son tendencia desde la pandemia. En el universo negacionista tiene mucho tirón el bulo que asegura que la pandemia fue creada para distraernos de la invasión del planeta por parte de reptilianos. Son seres extraterrestres que se encuentran entre nosotros y que ocupan las más altas esferas de poder en todo el mundo, según cuentan.

En el universo negacionista tiene mucho tirón el bulo que asegura que la pandemia fue creada para distraernos de la invasión del planeta por parte de reptilianos

P: ¿Por qué creéis que hay ciudadanos que son propensos a creerse cualquier bulo o fake news antes que a los expertos?

R: Una tendencia natural es creernos lo que nos cuenta nuestro amigo y familiar, al que conocemos y en quien confiamos, antes que a expertos que tienen experiencia y evidencia pero que nos son ajenos. Luego están los sesgos que tenemos interiorizados, prejuicios que dificultan nuestra percepción del mundo de un modo más racional. Y hay ciudadanos insatisfechos con su vida que encuentran en los bulos y en quienes los propagan un paraguas en el que cobijarse y un lugar en el mundo donde sentirse aceptados.

Hay ciudadanos insatisfechos con su vida que encuentran en los bulos y en quienes los propagan un paraguas en el que cobijarse y un lugar en el mundo donde sentirse aceptados

P: ¿Y cuáles son los objetivos de quien se inventa esos bulos?

R: El principal objetivo de muchos bulos de salud es el lucro económico, común a todas las pseudoterapias. Pero también hay personas que inventan bulos para conseguir notoriedad o perjudicar a terceros.

El principal objetivo de muchos bulos de salud es el lucro económico, común a todas las pseudoterapias

P: Uno de los aspectos más llamativos es que los bulos se difunden muy rápidamente, pero las rectificaciones no tienen el mismo alcance: ¿Por qué?

R: Para desmontar un bulo necesitas evidencia científica y un argumento coherente que lleva un tiempo elaborar para transmitirlo de forma comprensible. El bulo, en cambio, como no se basa en nada comprobable y no tiene ninguna limitación moral, se puede crear de forma muy rápida. Busca afectar a nuestras emociones de forma primaria, jugar con nuestros sentimientos y aprovecharse de ellos.

Como el bulo no se basa en nada comprobable y no tiene ninguna limitación moral, se puede crear de forma muy rápida. Busca afectar a nuestras emociones de forma primaria, jugar con nuestros sentimientos y aprovecharse de ellos

P: ¿Cuáles son las consecuencias de la difusión de bulos sobre salud?

R: La peor consecuencia es la muerte. Lo hemos visto en bastantes ocasiones con tratamientos milagro como el dióxido de cloro, un componente tóxico que puede llegar a matar. Los bulos de salud también son capaces de perjudicar a personas o compañías, originar su linchamiento mediático o arruinar su reputación online. En el caso de las vacunas, hemos comprobado que afectan de forma negativa a las campañas de vacunación. Y bulos de salud relacionados con enfermedades crónicas han llevado a personas a abandonar sus tratamientos médicos y acogerse a tratamientos milagro, con consecuencias muy negativas para su calidad de vida.

Los bulos afectan de forma negativa a las campañas de vacunación. Y bulos de salud relacionados con enfermedades crónicas han llevado a personas a abandonar sus tratamientos médicos y acogerse a tratamientos milagro, con consecuencias muy negativas

P: La pandemia del Covid-19 ha sido objeto de muchos bulos, y hoy en día sigue siendo así. ¿Es habitual u os ha sorprendido esa oleada de fake news?

R: La pandemia sorprendió a todos y, en el contexto de infodemia que hemos vivido, era una consecuencia lógica la avalancha de bulos, aprovechando la necesidad de la población de saber más sobre el coronavirus.

P: Los cambios de criterio en distintos momentos quizás no han ayudado: ¿Es posible que las autoridades hayan aumentado la desconfianza precisamente por esos cambios de discurso?

R: No es posible sino que es una realidad. En términos generales, los responsables políticos han cambiado de criterio de forma continua en los últimos años sobre las medidas a tomar en la pandemia y la ciudadanía ha sido consciente de ello. Tendrían que haber escuchado más a los verdaderos expertos.

P: Algunos bulos sobre el Covid-19 persisten: ¿Alguno que creáis realmente peligroso?

R: Siguen siendo especialmente peligrosos todos los bulos relacionados con las vacunas pues pueden contribuir a aumentar la reticencia vacunal, sobre todo en colectivos tan sensibles como los niños.

Siguen siendo especialmente peligrosos todos los bulos relacionados con las vacunas pues pueden contribuir a aumentar la reticencia vacunal, sobre todo en colectivos tan sensibles como los niños

P: ¿Podemos los ciudadanos denunciar estos bulos sobre salud?

R: Cualquier persona puede escribirnos a #SaludsinBulos para denunciar un bulo, ya sea a través de nuestra web o de redes sociales. Para combatir la desinformación en salud tenemos que colaborar todos, comunicadores, profesionales sanitarios y ciudadanos. Todos tenemos un papel importante para frenar la propagación de los bulos.

Para combatir la desinformación en salud tenemos que colaborar todos, comunicadores, profesionales sanitarios y ciudadanos