¿Cómo ha afectado a la educación el coronavirus?

Los niños y niñas de todas las edades tuvieron que empezar a recibir clases online y utilizar herramientas y aplicaciones digitales para terminar el curso durante la pandemia de la Covid-19. En este contexto, un estudio se plantea ¿Cómo ha afectado a la educación el coronavirus? y pone de manifiesto que la mayoría de las familias reconoce que la percepción que tienen ahora del e-learning ha mejorado después de la pandemia.

El confinamiento decretado a raíz de la pandemia provocada por la COVID-19 obligó a las familias a cambiar su estilo de vida por completo. Salir a comprar solo cuando era estrictamente necesario, teletrabajar siempre que se pudiera o recibir clases a distancia fueron algunos de los nuevos hábitos que nos vimos obligados a adquirir en tiempo récord.

Herramientas tecnológicas y métodos tradicionales, de la mano en la educación

Según este estudio, más del 80% de las familias de nuestro país reconoce que la experiencia con el e-learning durante el confinamiento fue más positiva de lo que pensaban. 

En el análisis se expone que los progenitores han cambiado la percepción que tenían de este tipo de herramientas y ha mejorado su valoración sobre ellas cuando se combinan con los métodos de enseñanza más convencionales.

La pandemia provocó “que los modelos educativos basados en herramientas tecnológicas y en procedimientos telemáticos, que hasta ahora se consideraban un complemento más de la educación presencial tradicional, hayan adquirido el máximo protagonismo por imperativo del estado de alarma”, así lo declara Ellen Wartella, directora del Centro de Desarrollo Humano y de Medios de la Universidad de Northwestern. 

La tecnología pasó a ser fundamental para continuar con las clases. De hecho, pasó a ser el canal especial para el aprendizaje hasta el punto de que, según los autores del estudio, ocupó el 56% del total de las actividades de los niños y adolescentes durante el periodo de confinamiento.

¿Cómo ha afectado a la educación el coronavirus?: Retos para todos

Hoy día se puede decir que estas herramientas tecnológicas ayudaron a los estudiantes a desarrollar sus actividades educativas y también aquellas complementarias. En el informe también se destaca el hecho de que las familias han dado más importancia a estas nuevas metodologías de aprendizaje, ya que han fomentado el desarrollo de otras habilidades en los niños y niñas. En este sentido destacan:

• La inteligencia emocional.
• Las habilidades sociales o de comunicación.
• La empatía.
• El liderazgo. 

El informe revela que el 54% de las familias contempla este tipo de aptitudes tan importantes como los programas educativos más convencionales. Incluso, el 33% las pone en primer lugar. 

Sin embargo, el proceso no ha sido sencillo ni rápido. Muchos centros educativos no estaban preparados para modificar la forma de dar clase, ni contaban con las herramientas necesarias para que cambiara el canal en el que impartir el programa educativo de la noche a la mañana.

Durante el periodo de confinamiento se utilizaron plataformas digitales escolares, se impartieron clases online mediante videoconferencia y se examinó a los alumnos de manera telemática. 

Las tareas se han enviado por correo electrónico o se han realizado actividades desde los dispositivos electrónicos. Para adaptarse a todo ello, según recoge el estudio, se ha empleado una media de entre 4 y 5 horas al día. 

En línea con esto, las apps educativas fueron las que más crecimiento experimentaron. Los niños y niñas entre los 2 y los 11 años han dedicado entre una y dos horas al día utilizando este tipo de aplicaciones. Además, el 90% de los progenitores dan preferencia a las aplicaciones con este tipo de contenido educativo por encima de las que solo ofrecen ocio. Y, en concreto, se decantan por aquellas en las que hay más variedad de contenido: ciencia, idiomas, etc.