Los menores cada vez tienen mayores problemas visuales y a la hora de conciliar el sueño por el abuso de dispositivos electrónicos con pantalla, y los datos se agravaron con la pandemia. Reducir el tiempo…
El 8 de febrero se celebra el Día Internacional de Internet Seguro (Safer Internet Day), para concienciar sobre la necesidad de preservar la seguridad en la red. Sin embargo menos de la mitad de los padres instala sistemas de control parental para asegurarse de que sus hijos usan internet de forma segura.
Vivimos en un mundo hiperconectado. Nuestros hijos e hijas han nacido en la era de la tecnología y la conectividad. De hecho, es muy común ver cómo niños muy pequeños navegan por internet y utilizan dispositivos electrónicos con una destreza superior a la de sus padres. En este contexto, surge la duda entre las familias: ¿Instalamos o no un sistema de control parental?
Los niños perciben los dispositivos electrónicos y el acceso a internet como algo cotidiano
Casi la totalidad (el 98%) de los niños y niñas de entre 10 y 15 años navega por Internet de manera habitual. Así se desprende del estudio “El uso de las tecnologías por los menores en España”, elaborado por el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI). En el mismo informe se expone que 7 de cada 10 menores tiene teléfono móvil. Lo que significa que acceden a internet, utilizan aplicaciones y redes sociales recurrentemente.
Vanessa González, directora de comunicación de Kaspersky Iberia, asegura que “de la misma manera que desde la infancia se enseña a los niños a no comunicarse con extraños o a no ir a lugares desconocidos, el espacio digital también tiene sus propias reglas de comportamiento seguro«.
González asegura también que “los padres pueden hacer que el mundo digital de sus hijos sea más seguro protegiéndoles de los contenidos inapropiados y ayudándoles a estar seguros en un entorno digital utilizando diversas herramientas y métodos”.
Tecnología sí, pero con vigilancia
Los niños y niñas no son conscientes de todo lo que hay detrás de internet. No conocen las normas que se deben aplicar para utilizar internet de forma segura. Con todo, según un informe de Kaspersky, solo el 48% de los padres utiliza aplicaciones de control parental.
El uso de las nuevas tecnologías es muy positivo para los peques. El estudio de ONTSI afirma que el 53% de los niños entre 6 y 15 años ha utilizado internet o aplicaciones en dispositivos electrónicos con fines educativos o escolares. Lo que significa que desde los propios centros educativos se fomenta el uso de la tecnología. Y más aún con las clases a distancia a raíz de la pandemia. Y es algo bueno, pero se debe controlar.
Conectarse a internet supone tener acceso a una cantidad de información ilimitada y de todo tipo. También aquella no recomendada o no apta para menores. Además, tienen acceso a redes sociales, y pueden chatear con otras personas (incluso desconocidas).
Por ello, tener un control de la actividad de los niños es muy importante. El 45% de los padres que no instalan controles parentales sí revisan el historial de navegación de sus hijos. Y el 51% asegura que los dispositivos se utilizan bajo su supervisión.
Cómo proteger a los niños del mundo digital: Los sistemas de control parental
En este sentido, las aplicaciones de control parental para filtrar los contenidos adecuados y los que no lo son, pueden ser una buena iniciativa, pero no es la única. Es vital la comunicación con ellos. Hablar con tus hijos e hijas sobre los posibles escenarios que se encuentran en internet explicándoles los pros y contras.
Además, dar ejemplo es fundamental para que perciban cómo es un buen uso de los dispositivos. Si, por ejemplo, se establecen normas de uso por horas, las madres y padres también debemos cumplirlas. Del mismo modo debemos respetar las comidas y cenas en familia, no utilizar dispositivos en la mesa, etc.
Especialmente para los adolescentes (con un uso intenso en redes sociales), es determinante explicarles los peligros de exponerse tanto y la importancia de su privacidad. Si necesitas asesoramiento al respecto, en la Tribu CSC puedes consultar a nuestro equipo de expertos en educación positiva y crianza respetuosa.
Además de monitorizar los contenidos que consumen, es importante controlar el tiempo que lo utilizan. Por ello, se deben establecer horarios de uso de dispositivos y conexión a internet, en función de su edad.
Es clave que los niños y niñas entiendan que la información que hay en internet no siempre es veraz. Con edades muy vulnerables pueden creerse todo lo que consultan y es peligroso. Por ello, se les debe enseñar a detectar y diferenciar información real de la que no lo es.
Birgitt Hölzel y Stefan Ruzas son terapeutas del bufete Liebling + Schatz, en Alemania. Como expertos aseguran que siempre es mejor la confianza que el control, pero:
“Cuando se trata del consumo de contenidos, los padres desconfían de lo que pueden encontrar en Internet, no de sus propios hijos. Por eso el control normativo es una buena idea, porque responde al deseo de los padres de proteger a sus hijos”.
Por ello, para proteger a los peques hay que aunar ambas modalidades: la comunicación con ellos y la instalación de sistemas que ayuden a salvaguardar su seguridad.
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