El ARN libre de células podría revolucionar el diagnóstico de preeclampsia

La enorme variabilidad y complejidad de este trastorno dificultan predecir el riesgo y desarrollar tratamientos. Ahora, un estudio reciente arroja luz sobre un posible método de diagnóstico para la preeclampsia a través del ARN libre de células plasmáticas.

El ARN libre de células plasmáticas se libera de las células al torrente sanguíneo y puede usarse para estudiar una variedad de enfermedades, incluida la preeclampsia. Abarca varios biotipos de ARN, como mRNA, miRNA y lncRNA.

Para la investigación, dirigida por el Dr. Zhou Si, director senior de investigación clínica de BGI Genomics, y publicada en el American Journal of Obstetrics and Gynecology, los investigadores analizaron el cfRNA de 917 embarazos: 715 embarazos sanos y 202 embarazos afectados por preeclampsia antes de la aparición de los síntomas.

Un revolucionario diagnóstico de preeclampsia que promete prevenir la preeclampsia en el futuro

Los investigadores detectaron 77 genes que se expresaban diferencialmente en madres sanas y en madres con preeclampsia prematura antes de la aparición de los síntomas. Es decir, los cambios moleculares anormales del ARN mensajero libre de células, el microARN y el ARN no codificante ayudan a revelar los determinantes patogénicos de la preeclampsia.

¿Cómo se mide el riesgo de preeclampsia?

Posteriormente, desarrollaron 2 clasificadores para predecir la preeclampsia prematura y la preeclampsia de aparición temprana antes del diagnóstico basándose en 13 firmas de ARN libre de células y 2 características clínicas (fertilización in vitro y presión arterial media, respectivamente).

Gracias a los hallazgos de este estudio se demostró por primera vez que el ARN mensajero, el microARN y el ARN largo no codificante pueden servir como biomarcadores potenciales de la preeclampsia, lo que promete prevenir la preeclampsia en el futuro.

De esta forma, se amplían las posibilidades terapéuticas para reducir eficazmente las complicaciones del embarazo y la morbilidad fetal, brindando más posibilidades para las pruebas prenatales de trastornos genéticos.

¿Cómo se diagnostica la hipertensión en el embarazo?

En la actualidad, la hipertensión gestacional se diagnostica cuando la mujer tiene presión arterial alta pero no tiene proteínas en la orina. La hipertensión gestacional ocurre cuando una mujer con niveles de presión arterial normales antes del embarazo desarrolla presión arterial alta después de las 20 semanas de embarazo.

El diagnóstico de hipertensión en el embarazo se realiza cuando en 2 o más tomas separadas por 6 h, la paciente presenta una presión arterial (PA) sistólica ≥ 140 mmHg y/o una PA diastólica ≥ 90 mmHg.

Pero, ¿qué pasa si te diagnostican preeclampsia? ¿Qué le pasa al bebé cuando la madre tiene preeclampsia? Si la embarazada presenta preeclampsia, existen riesgos tanto para la madre como para su bebé. La madre puede tener daño renal, convulsiones, accidente cerebrovascular o sangrado en el hígado. Asimismo, existe un riesgo alto de que la placenta se desprenda del útero y de que el bebé no crezca adecuadamente o fallezca.

Por todo ello, se suele tener un mayor control médico de estos embarazos, siendo frecuente la prescripción de medicinas y la recomendación de reposo e, incluso, en algunos casos se requiere la hospitalización. Las decisiones de tratamiento pueden diferir en función de la edad gestacional del embarazo y la gravedad de la preeclampsia.

Si quieres más información sobre los signos y síntomas de preeclampsia en el embarazo o necesitas asesoramiento profesional sobre el riesgo de preeclampsia en el embarazo, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la matrona Sara Caamaño.

Parto con preeclampsia y postparto inmediato

Si la mujer embarazada ha sido diagnosticada con preeclampsia y ya ha pasado de las 37 semanas de gestación, el médico probablemente le recomendará un parto prematuro. Esto puede implicar recibir medicamentos para inducir el parto o dar a luz al bebé por medio de una cesárea programada.

Tras el nacimiento del bebé, los signos y síntomas de preeclampsia casi siempre desaparecen dentro de las 6 semanas siguientes al parto. No obstante, a veces la presión arterial alta empeora en los primeros días después de dar a luz. La preeclampsia posparto implica un riesgo mayor, por lo que es importante continuar monitoreando a la madre durante ese tiempo.