La OMS califica el popular edulcorante aspartamo como «posiblemente cancerígeno»

La Agencia Internacional de Investigación contra el Cáncer (IRAC), órgano que pertenece a la OMS, ha calificado al edulcorante aspartamo como un «posible cancerígeno» para los humanos. Aunque también se incide en que la evidencia científica es todavía «limitada».

La OMS llevaba tiempo analizando este edulcorante sin azúcar. Los resultados de su evaluación han sido publicados hoy por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) y el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Aspartamo: ¿Qué es y en qué productos está?

El aspartamo es un popular edulcorante artificial sustituto del azúcar que está compuesto por fenilalanina, ácido aspártico y metanol. Este edulcorante es hasta 200 veces más dulce que el azúcar y se encuentra en miles de alimentos que solemos consumir en nuestro día a día.

Se trata principalmente de los denominados productos «light», «zero» o «0%», como bebidas, refrescos, postres, dulces, productos lácteos, productos hipocalóricos o adelgazantes.

Asimismo, está presente en multitud de productos de consumo familiar e infantil como gelatinas, helados, yogures, cereales para el desayuno, dentífricos e incluso medicamentos como pastillas para la tos y vitaminas masticables.

También se encuentra comúnmente en chicles y caramelos sin azúcar de una gran variedad de sabores, ya que proporciona el sabor dulce sin agregar calorías adicionales.

Estudios que vinculan el aspartamo con el cáncer y la diabetes

Aunque la OMS asegura que se debe seguir investigando, por el momento, los estudios epidemiológicos en humanos analizados por la FAO, inciden en que el aspartamo está vinculado a «algunos efectos cancerígenos y algunos efectos sobre la diabetes tipo 2».

Se trata de «estudios de gran envergadura», según los expertos. No obstante, se basan principalmente en observaciones a largo plazo y «no se puede descartar que haya efectos que confundan los resultados, en particular la estimación de la exposición». De ahí la necesidad de continuar con las investigaciones.

Por otro lado, 25 expertos del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés), han concluido que el aspartamo es un «posible cancerígeno» para el ser humano, y lo han incluido en el grupo 2B, el tercer nivel más alto.

Esta categoría se utiliza generalmente cuando hay evidencia limitada de que pueda producir cáncer en humanos o en animales de experimentación. Así, debido a la «limitada» evidencia científica sólida, los expertos han instado a desarrollar nuevos estudios futuros.

Sin embargo, IRAC como muestra su estudio, sí encontró suficientes indicios que encienden las luces rojas contra el aspartamo.

«Las evaluaciones del aspartamo han revelado que, si bien la inocuidad no preocupa de forma destacada en las dosis de consumo habitual de este producto, se han descrito posibles efectos que deben investigarse en más estudios y de mejor calidad«, confirmó el Dr. Francesco Branca, cirector del Departamento de Nutrición e Inocuidad de los Alimentos de la OMS.

Por su parte, Mary Schubauer-Berigan, jefa del Programa de Monográficos de la IARC, quiso aclarar un poco más las conclusiones a las que habían llegado tras el estudio durante la rueda de prensa:

«Esta clasificación refleja la solidez de la evidencia científica sobre si un agente puede causar cáncer en los seres humanos, pero no refleja el riesgo de desarrollar cáncer ante una exposición determinada«.

Este es el límite de consumo diario según la OMS

El JECFA ha subrayado que la ingesta diaria admisible de este producto es de 40 mg/kg de peso corporal. Es decir, lo han clasificado como cancerígeno, pero no han modificado su límite de ingesta diario, ya que han respaldado el límite de ingesta diaria aceptable para humanos que estaba fijado hasta el momento.

Eso sí, la OMS ha insistido en la necesidad de «moderar tanto el consumo de azúcares como el de edulcorantes», debido a sus efectos negativos en la salud.

No en vano, el azúcar es adictivo, conduce a la obesidad e incluso hay estudios que señalan un posible aumento del riesgo de cáncer. En este contexto, es importante destacar que el 80% de la comida envasada contiene azúcar añadido.

Por todo ello, la OMS recomienda consumir un máximo de 50 gramos de azúcar al día (como máximo el 10% de la ingesta total de calorías diaria), lo que equivale a 12 cucharaditas para una persona adulta.

No obstante, según la Organización Mundial de la Salud, nuestros hijos consumen más del doble de azúcar de lo recomendado por la OMS para adultos. Los nutricionistas estiman que los niños consumen en España 5 veces más azúcar del necesario a pesar de que los menores de 12 meses no deberían probar el azúcar (ni la sal). En especial, los productos infantiles contienen demasiado azúcar para los niños y niñas.

Si quieres saber cómo ir reduciendo el azúcar de la dieta de tus peques para mejorar su salud y con qué sustituirlo o necesitas asesoramiento profesional, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la dietista-nutricionista Rebeca Pastor.

Entre otras cosas, para reducir el consumo de azúcar puede ser una buena idea recurrir a algunas de las alternativas dulces naturales como dátiles, higos, plátanos machacados, la miel (aunque esta última es casi tan calórica como el azúcar blanco y aumenta el riesgo de caries igual que el azúcar, además de que los menores de un año no deberían tomarla por el riesgo de botulismo) o el sirope de arce.