¿Escuela infantil o abuelos? ¿Qué es mejor? Es una pregunta que, tarde o temprano, se plantean muchas familias cuyos progenitores trabajan fuera de casa y no tienen posibilidad de seguir cuidando a su bebé. Existen…
Un estudio dirigido por la University College de Londres y publicado en la revista científica ‘Journal of Gerontology: Social Sciences‘ pone de manifiesto la importancia de los nietos en la vida de los abuelos: los abuelos que perdieron el contacto con sus nietos durante el confinamiento impuesto por la pandemia por coronavirus sufrieron más síntomas de depresión.
La investigación, también descubrió que los abuelos que dejaron de cuidar a sus nietos o redujeron la cantidad de tiempo que les dedicaban informaron de una menor satisfacción y calidad de vida.
La importancia de los nietos en la vida de los abuelos
Los investigadores examinaron los datos de una muestra de 2.468 abuelos mayores de 50 años con nietos menores de 15 en Inglaterra, provenientes del Estudio Longitudinal Inglés sobre el Envejecimiento (ELSA).
Antes del brote de la pandemia, en febrero de 2020, el 52% de los abuelos cuidaba de sus nietos. Sin embargo, durante el primer año de la pandemia, las personas mayores se confinaron en casa y limitaron sus interacciones sociales para reducir el riesgo de contagio.
Como resultado, el 22% de los abuelos informó que su cuidado de los nietos se redujo en gran medida en comparación con la prepandemia, y alrededor del 10% dejó de cuidar a sus nietos por completo durante los primeros 9 meses de la pandemia.
En noviembre y diciembre de 2020, más de un tercio (34,3%) de los abuelos que dejaron de cuidar a sus nietos informaron de altos niveles de síntomas depresivos, como sentirse tristes o tener un sueño intranquilo. Asimismo, también declararon una menor satisfacción vital y una menor calidad de vida.
¿Qué son los nietos para los abuelos?
Los investigadores estudiaron la salud mental y física de los abuelos previa a la pandemia, sus características socioeconómicas y demográficas, sus contactos sociales con la familia y los amigos, e incluso la soledad que padecieron durante la pandemia para tratar de dilucidar si las relaciones observadas entre la reducción del cuidado de los nietos y el empeoramiento de la salud mental se debían a condiciones preexistentes. Sin embargo, concluyeron que la relación e interacción con sus nietos repercutía directamente en su bienestar emocional.
«Los abuelos que no pudieron ver y pasar tiempo con sus nietos por razones ajenas a su voluntad podrían haberse sentido frustrados y angustiados por ello, lo que tuvo consecuencias negativas para su salud mental. Cuidar de los nietos puede proporcionar a los abuelos una gratificación emocional y una sensación de utilidad y competencia, aumentando así la satisfacción vital.
La participación de los abuelos en esta actividad familiar también puede proporcionarles una sensación de valor y apego, fortaleciendo así las relaciones intergeneracionales y los intercambios emocionales positivos que podrían beneficiar su salud mental«, ha comentado el autor principal del trabajo, Giorgio Di Gessa.
Por su parte, la coautora del trabajo ha destacado cómo la menor importancia prestada durante el confinamiento a la salud mental de las personas mayores, cuya protección física se hizo fundamental durante este periodo, repercutió directamente en su bienestar:
«Si las políticas de distanciamiento físico siguen siendo una estrategia fundamental para proteger a las personas con mayor riesgo de contraer la COVID-19 o, de hecho, en una futura pandemia, debería prestarse atención a abordar la salud mental y las necesidades más amplias de las personas mayores que pueden sufrir la pérdida de funciones significativas en su familia y en la sociedad«, resalta la doctora Valeria Bordone (Universidad de Viena).
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La relación de los abuelos con los nietos también influye en el bienestar de los peques
El amor de los abuelos por sus nietos es capaz de rejuvenecerles, pero no solo les hace felices a los mayores. La interacción entre abuelos y nietos proporciona una fuente de bienestar cuyos beneficios son bidireccionales. Estudios anteriores demuestran, por ejemplo, que pasar tiempo con los abuelos aumenta el bienestar de los niños y su inteligencia emocional.
En concreto, según un estudio llevado a cabo por la Universidad de Oxford, es sumamente positivo que dejemos que nuestros hijos e hijas pasen tiempo de vacaciones con los abuelos. La investigación, realizada por la profesora Ann Buchanan del Departamento de Política e Intervención Social, estudió a más de 1.500 menores y cómo influía en estos la interacción con sus abuelos.
Concluyó que pasar tiempo con los abuelos aumenta el bienestar infantil. Es más, se descubrió que los peques que lo hacen tienen menos problemas de conducta. Asimismo, el mismo estudio también muestra que los niños y niñas que pasan tiempo de vacaciones con sus abuelos y abuelas tienen más inteligencia emocional.
Este estudio viene a reforzar investigaciones y encuestas anteriores que también remarcaban el importante papel de los abuelos en la felicidad infantil. Por ejemplo, con motivo del confinamiento debido a la pandemia por coronavirus, la startup LingoKids llevó a cabo una encuesta en España de la que se extraía la conclusión de que los niños y niñas necesitan relacionarse con sus abuelos para ser felices del todo. En concreto, los menores encuestados afirmaban que una de las tres cosas que más echaron de menos durante la cuarentena fue ver a sus abuelos.
En esto también coincide la investigación Berling Aging Study. Y es que, según este estudio, los pequeños consiguen activar las neuronas y las hormonas de los mayores, generando de esta forma un gran impacto positivo en su salud física, cognitiva y emocional.
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