La Fundación ANAR, una organización sin ánimo de lucro que ayuda a niños y adolescentes en riesgo, ha mostrado su "preocupación" ante el incremento de los intentos de suicidio y de las ideas suicidas en…
Una investigación realizada por la Academia Americana de Pediatría (AAP) en los servicios de emergencia de Chicago a lo largo de tres años y medio, revela que el 25% de menores de más de 10 años dan positivo en pruebas de riesgo de suicidio. Es decir, de aquellos que acuden a urgencias por una cuestión relacionada con la salud mental, 1 de cada 4 menores está en riesgo de suicidio.
El estudio examina los datos proporcionados después de que se implementara la detección universal del suicidio en el Departamento de Emergencias para todos los jóvenes de 10 años o más que se presentaron en el Hospital Infantil Ann y Robert H. Lurie de Chicago entre septiembre de 2019 y agosto de 2022.
Sus conclusiones revelan que en el 24% de 12.112 visitas al servicio de urgencias, los pacientes dieron positivo en cuanto a riesgo de suicidio.
El perfil de mayor riesgo: Jóvenes transgénero o de género diverso a partir de los 10 años
Casi el 80% de los encuentros en el servicio de emergencias que involucran a jóvenes transgénero o de género diverso de 10 años o más dieron positivo en pruebas de riesgo de suicidio mientras buscaban tratamiento en uno de los servicios de emergencias de Chicago durante un período de 3,5 años, según la investigación presentada durante la Conferencia y Exposición Nacional de la AAP de 2023 en el Centro de Convenciones Walter E. Washington.
El resumen, «Ideación suicida en jóvenes transgénero y de género diverso en el Departamento de Emergencias», se sirvió del registro médico electrónico, que identificó que de 565 encuentros entre jóvenes transgénero y de género diverso, se identificó riesgo de suicidio positivo en el 78% de los casos, y el 10% de los encuentros entre jóvenes transgénero y de género diverso respaldaron ideación suicida activa en el momento de presentación en urgencias.
Menores en riesgo de suicidio: no es una sorpresa para los psicólogos
«Desafortunadamente, estos hallazgos no me sorprendieron», manifiesta la autora del resumen, Amanda Burnside, psicóloga pediátrica asistente en el Hospital Infantil Ann & Robert H. Lurie de Chicago. «Habitualmente veo a jóvenes transgénero y de género diverso luchando con su salud mental en mi práctica como psicóloga clínica», añade la también profesora asistente de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento en la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern.
«El suicidio entre jóvenes transgénero y de género diverso representa una crisis nacional. Uno de cada cuatro jóvenes de secundaria que se identifican como una minoría sexual o de género intenta suicidarse durante un período de seis meses, y casi la mitad de estos jóvenes consideran seriamente intentar suicidarse«, resalta la autora en el informe.
Sin embargo, según la especialista, en los entornos de atención médica, «la investigación que involucra a estas personas históricamente se ha limitado a poblaciones de clínicas especializadas o a jóvenes con códigos de diagnóstico específicos de género documentados en el registro médico electrónico», por lo que es probable que este enfoque «subestime significativamente la prevalencia de jóvenes transgénero y de género diverso en entornos de atención médica».
Acoso, discriminación y falta de apoyo
Según la investigación, más del 77% de las visitas al departamento de emergencias de jóvenes transgénero y de género diverso fueron por una queja principal centrada en la salud mental.
«Los factores contribuyentes comunes incluyen el acoso y la discriminación, y es imperativo que sigamos apoyando a estos jóvenes», explica la especialista. En comparación con los jóvenes cisgénero, los jóvenes transgénero y de género diverso tenían 5,35 veces más probabilidades de tener un resultado positivo en la prueba de riesgo de suicidio.
«Debemos trabajar para garantizar que todos los jóvenes sean examinados de forma rutinaria para detectar el riesgo de suicidio en todos los entornos de atención médica», incide la psicóloga. «Necesitamos desarrollar sistemas sólidos para conectar a los jóvenes que dan positivo con los servicios de salud mental».
«Los cuidadores y otros adultos de apoyo deben consultar periódicamente con los jóvenes transgénero y de género diverso sobre su salud mental. Cualquier inquietud puede comunicarse al pediatra del joven», subraya la investigadora, que también incide en la importancia de dar a conocer las líneas de ayuda, disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana, como las Líneas de Ayuda de la Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo), en el caso de España, que ofrece a los menores la posibilidad de ponerse en contacto con especialistas a través de teléfono y/o chat.
Esta organización sin ánimo de lucro ya advirtió sobre el alarmante aumento de ideación suicida e intentos de suicidio en menores de edad en general: se han multiplicado casi por 26 los intentos de suicidio entre menores en los últimos 10 años y casi por 24 las ideas de suicidio.
¿Cómo identificar la ideación suicida en nuestros/as hijos/as?
Según los especialistas, los pensamientos suicidas o ideas suicidas se refieren a pensar o planear un suicidio. Estos pensamientos pueden ir desde crear un plan detallado hasta tener una consideración pasajera, pero no incluyen el acto final del suicidio, aunque en algunos casos podrían ser la antesala.
Lo que está claro es que los pensamientos suicidas son un síntoma de un problema subyacente. El tratamiento es efectivo en muchos casos, pero el tiempo es fundamental y el primer paso es pedir ayuda.
Por eso, si tu hija o tu hijo está teniendo estos pensamientos o habla sobre el suicidio, es esencial tomar medidas, ayudarlo y protegerlo. En la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la pediatra Gloria Colli, la psicóloga Mamen Bueno y la docente, logopeda y psicóloga infantil Elena Mesonero.
Ideación suicida: Síntomas y Causas
Un importante número de personas con ideas suicidas mantienen sus pensamientos y sentimientos en secreto, y no muestran señales de que nada esté mal. Por ello es fundamental estar identificados con los signos y aprender a detectarlos precozmente. La persona que experimenta o podría experimentar pensamientos suicidas puede mostrar las siguientes señales o síntomas:
- Sentirse o tener la apariencia de sentirse atrapado o desesperanzado.
- Sentir dolor emocional intolerable.
- Preocupación por la violencia, la muerte o morir.
- Tener cambios de humor, ya sea de felicidad o tristeza.
- Hablar de venganza, culpa o vergüenza.
- Experimentar agitación o un altísimo nivel de ansiedad.
- Cambios en los patrones de personalidad, rutina o sueño.
- Aumentar el consumo de drogas o alcohol.
- Conductas de riesgo, como conducir descuidadamente, pelearse o consumir drogas.
- Poner sus asuntos en orden y regalar sus cosas.
- Despedirse de otros como si no los fuera a volver a ver.
- Conseguir un arma o sustancias que podrían acabar con una vida.
- Experimentar depresión, ataques de pánico o trastornos de la concentración.
- Aislarse de los demás.
- Hablar sobre ser una carga para otros.
- Experimentar agitación psicomotora, como caminar o retorcerse las manos compulsivamente.
- No poder disfrutar las actividades que solían ser placenteras, como comer, hacer ejercicio, interacción social o las relaciones sexuales.
- Expresar remordimiento severo.
- Manifestar autocrítica.
- Hablar de suicidio o de morir.
- Lamentar estar vivo o haber nacido.
El contexto en el que sucede la ideación suicida debe ser también tenido en cuenta. La idea suicida puede sobrevenir cuando una persona siente que ya no es capaz de hacer frente a una situación abrumadora.
Esto podría suceder en casos de problemas económicos, familiares, la muerte de un ser querido, ser víctimas o testigos de violencia doméstica o abuso sexual, el final de una relación, ser víctimas de acoso escolar o cibernético, padecer la enfermedad de un ser querido o tener una afección de salud propia.
Sentimientos intensos de tristeza, remordimiento, rechazo y poca valía también pueden conducir a la ideación suicida.
Asimismo, existen factores de riesgo que pueden aumentar la probabilidad de ideación suicida:
- Antecedentes familiares de violencia, suicidio, negligencia o trauma infantil, abuso y problemas de salud mental.
- Sentimientos de desesperación.
- Sentirse identificado o conocer a alguien que ha terminado suicidándose.
- Participar en comportamientos imprudentes o impulsivos.
- Sensación de aislamiento o soledad.
- Identificarse como LGBTQIA+ sin apoyo familiar o en el hogar.
- No poder acceder a la atención de salud mental.
- La pérdida de trabajo, amigos, finanzas o un ser querido.
- Tener una enfermedad física o una afección de salud.
- Poseer un arma u otros métodos letales.
- No buscar ayuda por miedo o estigma.
- Padecer un trauma histórico, como la destrucción de la propia comunidad o cultura.
- Haber intentado suicidarse antes.
- Sufrir acoso o intimidación.
- Padecer algún tipo de trauma.
- Estar expuesto a relatos de suicidio, especialmente si son gráficos o sensacionalistas.
- Estar expuesto a comportamientos suicidas de otros.
- Tener problemas legales o deudas.
- Estar bajo la influencia de drogas o alcohol.
- Estrés debido a la discriminación y los prejuicios.
Asimismo, existen enfermedades físicas y trastornos de salud mental que aumentan el riesgo. Las afecciones que los investigadores han vinculado a un mayor riesgo de idea suicida son la depresión, la esquizofrenia, el trastorno bipolar, algunos rasgos de la personalidad (como la agresividad), padecer condiciones que afectan a las relaciones, una lesión cerebral traumática, afecciones que implican dolor crónico, alcoholismo o drogadicción, trastorno límite de la personalidad y trastorno por estrés postraumático.
0 responses on "1 de cada 4 menores a partir de 10 años da positivo en riesgo de suicidio: Cuáles son las causas y cómo identificar las señales que ponen a nuestros/as hijos/as en riesgo"