Cuando tu perro no es solo una mascota, si no un miembro más de tu familia, es normal que te preocupe que la llegada del bebé pueda afectarle, por eso te voy a contar las…
Un estudio realizado con niños y adultos ha descubierto que la edad avanzada y el hecho de haber tenido un perro antes se asocia a una mayor capacidad para reconocer las emociones de los perros a partir de las expresiones faciales y prevenir un posible ataque.
La edad y haber tenido perro antes, claves para anticipar un ataque de un perro a niños y adultos
Reconocer emociones a partir de expresiones faciales es una parte clave de la comunicación no verbal entre especies. Ya estudios anteriores habían sugerido que los niños de 3 a 5 años eran menos capaces de reconocer las emociones de los perros que los niños y niñas más mayores y las personas adultas. Pero, a pesar de ello, era necesario seguir investigando para aclarar la relación que existe entre la edad de las personas, su experiencia previa con los perros y la capacidad para reconocer las emociones del animal.
Para hacerlo, un equipo de la Universidad de Jyväskylä (Finlandia) liderado por Heini Törnqvist inició una investigación con 34 adultos, 28 niños y niñas de 4 años y 31 de 6. A todos ellos les pidieron que vieran imágenes en una pantalla de ordenador de varios rostros de perros y humanos con diferentes expresiones. Cuando acabaron, les solicitaron que calificaran cada expresión en función de su nivel de felicidad, enfado, positividad, negatividad o nivel de excitación.
En líneas generales y siguiendo los resultados de investigaciones anteriores, personas de todas las edades con experiencia previa con perros dieron calificaciones más o menos similares de las imágenes. Pero también hubo algunas diferencias entre los grupos.
Así, independientemente de la experiencia previa con perros, los adultos y niños de 6 años podían reconocer correctamente las caras de perros agresivos con mayor frecuencia que los niños de 4 años. Sin embargo, los niños de 4 y 6 años mostraron una capacidad similar para reconocer expresiones humanas.
En comparación con los adultos, los niños y niñas calificaron las expresiones agresivas de los perros como más positivas y con un nivel de excitación más bajo. De hecho, los peques no suelen interpretar como agresivo que un perro te enseñe los dientes. Por su parte, los participantes que no tenían experiencia con perros calificaron las expresiones agresivas de los perros como positivas frente a los que sí tenían esta experiencia previa que no lo hicieron. En comparación con las expresiones humanas agresivas, los niños calificaron las expresiones agresivas de los perros como más positivas y con un nivel de excitación más bajo.
Los hallazgos del estudio sugieren que la capacidad de las personas para reconocer las emociones de los perros (sobre todo la agresividad y el posible ataque) mejora con la edad, lo que podría deberse a una mayor experiencia con los animales, además de a la maduración de las estructuras cerebrales implicadas en el reconocimiento de expresiones.
¿Qué hacer para evitar ataques de perros a niños?
Los menores de 6 años son los más afectados y los más vulnerables ante la agresión de un perro, según un estudio que analizó a 236 menores en un hospital de Barcelona. En casi el 80% de los casos, el perro era conocido o de la familia. Y todo, pese a que, tal y como explica la educadora canina y experta en familias multiespecie, Tamara Hernán, en su blog, «la agresividad defensiva de los perros con niños se puede prevenir».
Hay que tener en cuenta que el hecho de que un perro agreda a un peque si se siente amenazado no lo convierte en agresivo. Simplemente, defiende con su boca y sus dientes cuando nadie le escucha su comunicación corporal. Y no hay que olvidar que para ellos convivir con un bebé o un niño/a pude llegar a ser muy estresante, sobre todo si no lo han hecho en su etapa de cachorro. ¿Qué hacer para evitar ataques de perros a niños? Hernán nos da algunas claves básicas:
- No dejar nunca al perro y al niño solos sin supervisión. Ambos son impredecibles y es importante no dejarlos solos ni un segundo.
- Educar a los niños y niñas y a toda la familia multiespecie en su conjunto. Para ello, puede ser recomendable acudir a algún educador canino. Si los niños aprenden aspectos básicos de los perros, se reducirá significativamente el riesgo de agresión.
- Conocer la comunicación canina lo que permitirá reconocer el estrés y la incomodidad del animal. Así se puede evitar que se produzca la agresión, además de reducir el estrés del perro.
Además, hay algunas recomendaciones elementales, como son:
- No tocar a un perro desconocido sin preguntar.
- No invadir nunca el espacio del perro, es preferible que sea el animal quien se acerque y nos olfatee primero.
- Nunca tocar directamente a un perro por encima de la cabeza, ya que puede ser un gesto intimidatorio para el animal. También es recomendable evitar la cola y las patas. Siempre es mejor hacerlo en el lado o la parte atrás del cuello.
- No abrazar a un perro, de hecho, en el lenguaje canino no es una muestra de cariño, sino justo lo contrario.
- Es importante no molestar a un perro mientras come o duerme.
- No quitarle un hueso, pelota o juguete si está jugando con ellos.
- Si quieres bajar a un perro del sofá o de la cama, no lo hagas a la fuerza.
- No pasar corriendo, gritando o gesticulando exageradamente cerca de un perro desconocido, ya que podría asustarse y atacar.
Para Tamara Hernán, es clave conocer las señales de incomodidad y miedo más frecuentes de los perros y que pueden anticipar y evitar esta agresión. De hecho, en muy raras ocasiones un perro ataca sin avisar antes. Algo que resulta algo más sencillo gracias a la escala de comunicación canina:
- Olfatear el suelo, rascarse.
- Sacudirse, estirarse.
- Mirar a otro lado, apartarse.
- Lamer, lamerse.
- Rabo entre las piernas, huir.
- Tumbarse boca arriba.
- Nervioso, ladrido.
- Paralizarse.
- Tensión muscular, ladrar.
- Enseñar dientes, gruñir.
- Marcar, morder el aire.
- Atacar para defenderse.
Por supuesto, no todos los perros reaccionan igual y, en función de sus experiencias previas puede mostrar solo alguna, todas o ninguna señal previa a la agresión. Además, el orden de las señales tampoco tiene por qué ser igual en todos los perros.
¿Qué hacer para evitar ataques de perros? ¿Cómo podemos prevenir los ataques de perros? ¿Cómo frenar el ataque de un perro? ¿Cómo defenderse de un perro que te ataca? ¿Cómo mantener alejados a los perros agresivos? ¿Cómo ahuyentar perros agresivos? ¿Qué hacer si un perro te ataca? Si tienes más dudas, en la Tribu CSC cuentas con un equipo de expertos/as en salud infantil y crianza respetuosa que puede ayudarte a resolverlas.
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