¿Existen los remedios caseros para aliviar la tos?

Pero puede ser que la tos que le moleste a vuestro peque sea tos seca, y por mucho que queráis quitarle esa tos con higienes nasales, estas no funcionen porque puede que el problema no esté en el exceso de moco sino en una inflamación o irritación.Si realmente esa tos es muy, muy seca y persistente lo ideal será ir al médico para descartar laringitis (inflamación de la laringitis) u otras enfermedades que necesiten una medicación bien concreta. Pero si ya el pediatra ha descartado todo lo más grave y queréis gestionar un poco mejor la tos, allá van algunos remedios caseros para aliviar la tos en niños pequeños.

Remedios caseros para aliviar la tos en niños

Si la tos es muy molesta, se mantiene mucho tiempo o es intensa, aquí tenéis algunas recomendaciones para aliviar a los peques y que puedan descansar por las noches:

Darles de beber

Darles el pecho, ofrecerles su biberón o un vaso de agua o leche puede ser de ayuda. El hecho de tragar ayuda a hacer una pequeña pausa respiratoria, que tiende a relajar el reflejo de la tos. Y el hecho de beber favorece la salivación y ayuda a lubricar la garganta. Si podéis calentar un poco la bebida que le deis, estimularéis un poco más la salivación. Puede que el efecto del calor, si les es agradable, les haga liberar endorfinas haciendo que les moleste menos la garganta, tosiendo menos, a su vez.

 

 

Usar un humidificador

Si la humedad de la casa (o de la habitación) es demasiado baja, podéis utilizar un humidificador para ayudar a que la mucosa no esté tan seca. La humedad relativa ideal está entre un 40 y un 60% de humedad. Podéis saber a cuánto estáis con un higrómetro. Si vivís en zonas secas, si acostumbráis a tener la calefacción alta o si usáis bombas de calor puede que os venga bien tener un humidificador en casa. Si vivís cerca del mar o en zonas húmedas, entonces casi seguro que, ventilando bien cada día, no os hará falta ningún humidificador.

Productos naturales

Científicamente, no se ha podido demostrar que la cebolla funcione, pero muchas familias me cuentan cómo la cebolla les ha proporcionado largas noches de sueño sin tos. Cortando por la mitad una cebolla y poniéndola cerca de la personita que tiene tos seca, parece que tose menos.

Yo le atribuyo estos logros por el hecho de que la cebolla activa las glándulas lacrimales, y también de alguna forma hace que las mucosas de las vías respiratorias estén algo más lubrificadas. Lógicamente, si tienen tos porque tienen moco, la cebolla no les va a hacer ningún efecto, pero si la cuestión es que tosen por sequedad, entonces quizá sí sea la solución. Eso sí… la habitación, y si os descuidáis, también la casa, acabará oliendo bastante mal…

Como remedio casero para aliviar la tos de los/as niños/as de más de un año, también podemos contar con la miel. Mezclada con agua o leche, o en una cucharita, parece ser que también aliviaría la tos más bien seca. En cualquier caso, la dietista-nutricionista del equipo de CSC, Rebeca Pastor, recuerda que la miel habría que usarla de forma «puntual» y nunca en menores de un año.

En la bibliografía también hablan del regaliz, el jengibre, el llantén y la cúrcuma como productos antiinflamatorios, pero para aliviar la tos de los más pequeños de la casa, no se recomiendan.

Cómo prevenir la tos en bebés y niños pequeños

Y si lo que queréis es prevenir, en lugar de aliviar la tos, recordad:

• Evitar el contacto con personas enfermas (o usar mascarilla quién lo esté para evitar contagiar a los demás).
• Lavarse las manos de forma regular.
• Mantener una buena hidratación.
• Descansar lo suficiente.

 

 

Y recordad que no hay suplementos ni vitaminas que activen el sistema inmunológico. Lo mejor que podéis hacer es comer todos de manera variada y saludable. En la Tribu CSC nuestra dietista-nutricionista, Rebeca Pastor, siempre nos da buenos consejos al respecto.

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