Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres: ¿Cómo mejorar la salud integral de las mujeres?

El 28 de mayo se celebra el Día Internacional de la Salud de la Mujer. El objetivo es poner de relieve la discriminación que sufren las mujeres en temas de salud. Desde las organizaciones internacionales se pide que se trabaje con una perspectiva de género. Hoy ponemos algunos ejemplos de cómo afecta a la salud de las mujeres esa falta de equidad.

El Día Internacional de la Salud de la Mujer se instauró en 1987 en Costa Rica. Allí la Red de Salud Mundial de las Mujeres por los Derechos Sexuales y Reproductivos (WGNRR) estableció esta efeméride para recordar, reivindicar y concienciar sobre el derecho de todas la mujeres a tener una salud completa a lo largo de toda la vida.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), «el género es un factor determinante de inequidades sanitarias». Ser mujer limita el acceso a la cobertura sanitaria universal en muchos países y también determina la trayectoria profesional de los trabajadores sanitarios.

Ser mujer implica menos ingresos, salarios más bajos, más temporalidad en el empleo, sobrecarga por el cuidado de familiares y mayor dependencia económica.

Y muchas enfermedades proceden de los roles sociales y estereotipos que aumentan la vulnerabilidad de la población femenina. Y esa vulnerabilidad afecta a la salud de las mujeres: más susceptibles de sufrir depresión y ansiedad, trastornos musculoesqueléticos, algunos tipos de cáncer o infecciones de origen sexual. Y son víctimas de violencia de género.

Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer en 2022

Este año las acciones reivindicativas se aglutinan bajo varios lemas (o hashtag) en inglés. Por un lado, #ResistAndPersist (resiste y persiste) en medio de las crisis y la incertidumbre global, #WomensHealthMatters (la salud de las mujeres importa) y #SRHRisEssential (la salud y derechos reproductivos y sexuales son esenciales).

La WGNRR estima que en un contexto de recuperación postpandemia, los gobiernos «siguen sin abordar los impactos de género de la pandemia». Con esos «impactos» la organización hace referencia a la pérdida de medios de subsistencia, el aumento de la carga de cuidados no remunerados para mujeres y niñas, mayores riesgos de violencia de género y barreras para acceder a servicios esenciales de salud sexual y reproductiva. En ello se incluye obstáculos al aborto seguro y la atención posterior.

Además, según esta Red Mundial de Mujeres, las múltiples crisis a las que nos enfrentamos ahora (económica, política, humanitaria, climática y de la desinformación) afectan a los derechos de la salud de las mujeres, cuya prioridad se desdibuja por esta situación.

Retrocesos y avances en la salud de las mujeres en el mundo

La WGNRR repasa en el comunicado por el 28 de mayo Día Internacional de la Salud de la Mujer algunos ejemplos de retrocesos y avances en la salud de las mujeres en el último año.

Retrocesos

Son pasos hacia atrás que se han registrado en todo el mundo. El más llamativo y que puede suponer un antes y un después para la salud de las mujeres es sin duda el que puede ocurrir en Estados Unidos. El borrador de la mayoría de jueces conservadores recoge la anulación de la sentencia Roe VS Wade en la que se basa la legislación estadounidense de los derechos al aborto. «La pérdida de este precedente legal histórico impactará en el derecho al aborto en todo el mundo«, denuncia la Red Mundial de Mujeres.

En Ucrania, la invasión militar rusa está acabando con escuelas y hospitales. Se prevé que decenas de miles de mujeres embarazadas den a luz en refugios antiaéreos o desplazadas de su hogar. Además, ha aumentado la violencia sexual y violaciones durante la guerra.

En Sri Lanka, con una crisis económica y política, las mujeres no pueden acceder a los servicios y productos de salud sexual y reproductiva porque el sistema de salud está paralizado. En la República Democrática del Congo, las mujeres y niñas no tienen acceso a los servicios básicos de salud.

Y mientras, en África Oriental se ha paralizado el proyecto de ley de derechos de salud sexual y reproductiva y en Corea del Sur tienen que luchar contra el surgimiento de un movimiento masculino antifeminista y la elección de uno de sus líderes como presidente. En Afganistán, leyes discriminatorias impiden a las mujeres y niñas ir a la escuela o trabajar, aumentando las cargas de cuidados de esta población.

Avances en la salud de las mujeres

Afortunadamente, también se han producido avances en la salud de las mujeres. En Kenia, el Tribunal Superior ha reconocido la atención del aborto como un derecho fundamental en virtud de la Constitución de Kenia. Esto impide arrestos y juicios arbitrarios contra el personal médico y las pacientes.

En Ghana, el gobierno por fin reconoce en sus leyes la importancia del servicio de aborto seguro para la salud y el bienestar de las mujeres. Así, ahora se incluye la violación, el incesto, las anomalías o las enfermedades fetales o la protección de la salud física y mental de la mujer como situaciones en las que se puede realizar un aborto.

Argentina, México y Colombia han liberalizado sus respectivas leyes de aborto en medio de la pandemia. «Con diversos grados de liberalización, estableciendo un tono increíblemente positivo para que el resto de los estados de la región sigan su ejemplo», según la WGNRR.

Y por último, la WGNRR también aplaude la decisión de la OMS de renovar sus recomendaciones sobre el aborto seguro.

Ejemplos de por qué es necesaria una salud con perspectiva de género

Al margen de las realidades que subraya la Red Mundial de Mujeres por los Derechos Reproductivos, lo cierto es que los ejemplos los tenemos más cerca de lo que nos imaginamos. Como vemos, el derecho al aborto vuelve a ponerse en duda a diferentes niveles. Nuevamente las decisiones sobre el cuerpo de una mujer no la tenemos nosotras, sino que trasciende a lo público y todo el mundo tiene opinión.

Salud Sexual y reproductiva

El Consejo de Ministros del Gobierno español acaba de aprobar la reforma de la ley sexual y reproductiva y de la interrupción del embarazo. Se trata de una reforma impulsada por el Ministerio de Igualdad que recoge, entre otros puntos, el derecho a la salud menstrual.

Por primera vez se recoge en una ley la regulación de la incapacidad temporal pagada por el Estado para aquellas mujeres que tengan reglas dolorosas e incapacitantes. Ha generado apoyos y rechazos a distintos niveles de la sociedad, pero, al menos, pone sobre la mesa un tema tabú: la regla. La reforma incluye la dispensación gratuita de productos de higiene en centros educativos, penitenciarios y servicios sociales.

También ha generado controversia la reforma del derecho al aborto que recupera algo que se perdió en la última reforma: el derecho de las mujeres a partir de 16 años a abortar sin necesidad del consentimiento de los progenitores. En esto la educación sexual es fundamental. En vez de estigmatizar a las adolescentes, lo que hay que hacer es apoyarlas decidan lo que decidan.

La ley también recoge nuevas «formas de violencia contra las mujeres»: la explotación reproductiva, el aborto y el embarazo forzados, y la esterilización y la anticoncepción forzosas.

Investigación con perspectiva de género

Otros aspecto que en muchas ocasiones choca con la igualdad de género y afecta a la salud de las mujeres es que la investigación científica suele obviar la perspectiva de género. Ha ocurrido en la investigación sobre la pandemia del Covid-19.

Ha ocurrido con la vacuna contra el coronavirus. Muchos de los estudios han ignorado las consecuencias de la vacuna en la salud sexual y reproductiva de las mujeres. Y han sido profesionales sanitarias las que han ido impulsando algunos estudios para conocer esos impactos. Luego, sí se han realizado estudios que demuestran que provoca trastornos, pero incluso algunos investigadores reconocen que en la investigación sobre la vacuna no se ha tenido en cuenta el factor del género.

Las mujeres embarazadas y madres lactantes también han tenido que afrontar mensajes contradictorios sobre la vacunación, alentada por movimientos antivacunas, escépticos y negacionistas. Las expertas de Criar Con Sentido Común han escrito en muchas ocasiones sobre la seguridad y eficacia de las vacunas con el objetivo informar y tranquilizar a la población.

Visibilización de enfermedades que solo afectan a las mujeres

El cáncer de cuello de útero, de ovarios, la endometriosis… Existen enfermedades que solo afectan a las mujeres. Muchas de ellas están invisibilizadas, como es el caso de la endometriosis, cuyas pacientes sufren enormemente a nivel físico (dolor) y mental (ansiedad, depresión, etc.).

Otras afectan a hombres y mujeres, pero afectan más a las mujeres, como el cáncer de mama, la fibromialgia o la encefalomielitis miálgica (mal conocida como fatiga crónica). Son enfermedades que tienen un gran impacto en la vida de estas personas y que requieren una abordaje multisectorial para paliar las consecuencias.

En salud mental también las mujeres sufren enormemente. La pandemia ha demostrado que los niveles de ansiedad y depresión han crecido. Pero no solo en la pandemia. Las mujeres sufren ansiedad, estrés que puede derivar en depresión durante el embarazo y tras el nacimiento del bebé. Las presión social, los estereotipos o las expectativas irreales sobre la maternidad son realidades que nos impactan diariamente.

Son situaciones que todavía no se abordan de manera generalizada desde el punto de vista de la prevención en salud pública. Se busca remedio cuando ya ha aparecido la herida, no antes.

Cuidados de la mujer en el embarazo y el parto

En Criar Con Sentido Común somos firmes defensoras del trato respetuoso a la mujer durante el embarazo, el parto y el posparto. Y ese trato respetuoso es extensivo al bebé. Los niños y niñas merecen el mismo respeto que cualquier persona, y más en un momento de tanta vulnerabilidad como el nacimiento.

Por desgracia, la violencia obstétrica sigue ocurriendo. Y hay trato poco respetuoso a la madre y al bebé cuando se les separa en las cesáreas o cuando se ignora a las madres y no se les permite tener el parto que realmente desean.

Afortunadamente se dan pasos y en España empiezan a proliferar ejemplos de medidas encaminadas a mejorar este aspecto de los cuidados de la mujer: hospitales más humanizados y centros de nacimiento. Ese trato respetuoso también debe extenderse a la lactancia materna. Muchas mujeres la abandonan de manera prematura por falta de apoyo, información o un asesoramiento insuficiente.

Precisamente en la Tribu CSC nuestro equipo atiende a diario cuestiones relacionadas con la salud de las mujeres, salud infantil, lactancia materna y crianza.

Medidas reales de conciliación para favorecer la salud de las mujeres

Y, por último, por no alargarme, la salud de las mujeres también depende de la conciliación. Las 16 semanas de permiso por cuidados de hijos son insuficientes, incluso aunque se haya ampliado para el otro progenitor. Nuestros bebés nos necesitan al 100% al menos durante el primer año de vida.

Además, es incomprensible que una mujer que sufre un parto traumático o es sometida a una cesárea no pueda acceder a una baja por enfermedad, independiente del permiso por cuidado de hijos. Cualquier persona que se somete a una intervención quirúrgica, tiene derecho a esa baja para recuperar su salud.

La nueva reforma de la ley preparada por el Ministerio de Igualdad incluye un nuevo permiso preparto desde la semana 39 de gestación, que será compatible con el permiso de maternidad.

Las familias monoparentales también deberían ser tenidas en cuenta. Los bebés de madres monoparentales o con solo un progenitor tienen el mismo derecho a pasar tiempo con ellas, por lo que estas deberían disfrutar de un permiso equivalente a una pareja.

Y todos estos no son más que algunos ejemplos. Personalmente creo que el Día Internacional de la Salud de la Mujer está para esto. Resiste y persiste. La salud de las mujeres importa.