Tics nerviosos en los niños: ¿Debemos intervenir?

Los tics nerviosos pueden afectar a entre un 5% y un 20% de la infancia en edad escolar

Los tics nerviosos en los niños son movimientos involuntarios y repentinos que, la mayoría de las veces, igual que aparecen, desaparecen espontáneamente con la edad. No es necesario intervenir, salvo que sean muy exagerados y dificulten el día a día del menor. Sí existen trastornos como el de Tourette que se caracteriza por la presencia de tics diversos que pueden condicionar el día a día.

«Los tics pasajeros surgen en la infancia y no hay que tratarlos. Tienden a desaparecer con la edad. Pero es importante no llamar la atención al niño o niña constantemente por ese tic porque eso sí puede causarle ansiedad y provocar que ese tic se haga crónico», explica Mamen Bueno, psicóloga del equipo de Criar Con Sentido Común, quien puede atenderos online a través de la Tribu CSC.

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Tipos de tics nerviosos en los niños

Una de mis hijas tiene un tic de este tipo. Consiste en abrir la boca y estirar los músculos de la cara. En alguna ocasión le he preguntado por qué lo hace. «Tengo los labios secos», me dice. Y ahí se acaba la conversación. Reconozco que me ha generado cierta inquietud innecesaria:

«Un tic es un movimiento involuntario así que, por mucho que insistamos, no va a desaparecer. Lo mejor es no incidir en ellos porque, la mayoría de las veces, igual que vienen se van, aunque a veces a los padres les pueda parecer que tardan mucho en irse», insiste Mamen Bueno.

 

Tics nerviosos en los niños: Cómo ayudarles

 

Los tics nerviosos en los niños son movimientos anormales, involuntarios y repetitivos. Duran escasos segundos. Los más frecuentes, según este artículo de la revista Pediatría Integral, se dividen en tics motores y fónicos o vocales. Los más habituales son tics de parpadeo y olfateo, pero también hay niños que encogen los hombros o que carraspean.

Nuestra psicóloga aclara que en los casos más graves o relacionados con algún trastorno, «sí hay que intervenir». Hay menores que tienen tics agresivos como arañarse o cortarse y otros que realizan movimientos obscenos con las manos y dedos (se denomina copropraxia). Por otro lado, pueden repetir sus propias palabras (palilalia), repetir lo que dicen los demás (ecolalia) o emitir insultos y palabras obscenas (coprolalia).

¿Por qué mi hijo/a tiene un tic nervioso?

Detrás de los tics nerviosos en los niños hay factores hereditarios, alteraciones neurobiológicas (principalmente en la región de los glanglios basales) y factores psicológicos. También hay agentes ambientales que pueden influir en los tics.

La Sociedad Española de Neurología (SEN) explica que los tics son «muy influenciables» por diferentes situaciones. El estrés, la ansiedad, la excitación, la fatiga, el aburrimiento o incluso el calor pueden intervenir en la presencia e intensidad de esos movimientos o sonidos involuntarios. Recientemente se ha detectado un nuevo trastorno, el Tiktok tic, que está provocando que muchos adolescentes adopten tics de ver a otras personas con ellos en redes sociales.

 

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Según el artículo citado antes, los tics nerviosos pueden afectar a entre un 5% y un 20% de la infancia en edad escolar. Es dos veces más frecuente en niños y tiende a disminuir con la edad. Estos tics nerviosos en los niños pueden aparecer entre los cinco y siete años, se agudizan entre los 8 y los 12 y tienden a remitir a partir de los 15 años.

Muchos menores ni siquiera son conscientes de ellos. Según la SEN, la variabilidad de los tics nerviosos en los niños está influida por su severidad, la capacidad de disimular o camuflar el tic y por la interferencia que provoca en la vida diaria y la autoestima. En esos casos, sí hay que acudir a Pediatría para consultar.

Los tics nerviosos en los niños asociados a trastornos

Cuando los tics se hacen crónicos y son al menos dos tipo motores y uno tipo vocal se considera que el menor tiene Síndrome de Tourette. Este problema afecta al sistema nervioso central de una persona y causa esos tics. Son diarios o muy frecuentes y, por supuesto, involuntarios.

En los casos más graves o más prolongados, esos tics se vuelven más complejos y pueden ir cambiando de tipo y de intensidad. Según la Sociedad Española de Neurología, es muy raro que el Síndrome de Tourette sea «puro», es decir, que solo haya tics:

«Lo habitual es que venga acompañado de un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), un trastorno obsesivo compulsivo (TOC), conductas impulsivas y/o autolesivas, ataques de rabia, depresión, ansiedad, alteraciones del aprendizaje y rasgos leves del trastorno del espectro autista«.

 

Tics nerviosos en los niños: Cómo ayudarles

 

Estas complicaciones pueden tener un impacto muy alto en la calidad de vida de estos niños. De ahí, la importancia del diagnóstico y el control por parte de los especialistas.

¿Cuál es el tratamiento de los tics nerviosos en los niños?

Como digo, los tics nerviosos en los niños no deben ser signos de alarma. Solo si son muy exagerados e interfieren en la vida de nuestro hijo o hija debemos consultar. El diagnóstico no suele ser complicado. Generalmente se basa en una observación detallada y con una historia clínica completa. Para ello se recogen datos de cuando se iniciaron los tics, la frecuencia y duración, las situaciones que lo generan o el impacto que producen, entre otros elementos.

Una de las pistas es que algunos menores sienten una sensación premonitoria antes de una serie continuadas de tics, como ocurre antes de estornudar. Eso puede ayudar a los profesionales sanitarios a diagnosticar el trastorno. En algunos casos se realiza una exploración neurológica.

 

Tics nerviosos en los niños: Cómo ayudarles

 

Los tics transitorios no requieren ningún tratamiento. Cuando los tics nerviosos en niños vienen acompañados de TDAH o TOC el tratamiento ha de ser individualizado. En algunos casos (sobre todo con el Síndrome de Tourette) se recurre a tratamiento farmacológico.

Estos niños también pueden necesitar ayuda psicológica. En los casos graves, los padres deben conocer el trastorno y darles herramientas a sus hijos para aprender a lidiar con los momentos de estrés. También es recomendable la colaboración del entorno escolar.

En cualquier caso, tanto en los tics nerviosos en los niños, como con el Síndrome de Tourette u otro trastorno, es importante no obsesionarse ni presionar a los peques. Ellos no tienen ninguna responsabilidad ni pueden evitar tener esos tics.

 

3 abril, 2024

2 responses on "Tics nerviosos en los niños: ¿Debemos intervenir?"

  1. Mi hija de 4 años ha empezado con tics en el cuello y una mano. Y estoy pasándolo muy mal. Se que puede ser pasajero pero me duele tanto verlos…

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