Día Internacional del Niño con Cáncer: Tipos más comunes en la infancia

Aunque la incidencia del cáncer infantil es baja, su aparición suele ser devastadora para una familia. El miedo, la incertidumbre y el dolor se encajan en el hogar y entorno de esa familia. También la necesidad de conocer y de adquirir información. Lo positivo es que la supervivencia de los niños con cáncer es alta, de entre el 70-80%. Hoy repasamos los tipos de cáncer más frecuentes en la infancia.

Algunos datos sobre el cáncer infantil

La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que cada año se diagnostica cáncer a cerca de 400.000 niños y adolescentes de entre 0 y 19 años. Existe una gran diferencia entre países ricos y pobres. La incidencia en España es muy baja. Según datos de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), alrededor de 1.000 niños al año en nuestro país son diagnosticados de cáncer, lo que representa el 3% de todos los cánceres.

Pero, ¿qué es el cáncer infantil? Según la AECC «no es una sola enfermedad, sino que incluye un gran número de enfermedades, con unas características particulares y con un comportamiento absolutamente diferente entre sí». Lo que sí tienen en común todas es que su origen es el crecimiento anormal de una célula o células que tienen la capacidad de invadir «tanto los órganos vecinos como los órganos alejados».

En los niños el proceso es más rápido que en los adultos. La células tumorales suelen ser embrionarias e inmaduras y por tanto crecen más rápidamente y de manera más agresiva.

La OMS subraya que a día de hoy se desconocen las causas de la mayoría de cánceres infantiles. Pocos de estos están causados por factores ambientales o malos hábitos a estas edades. Según este organismo, solo el 10% de los menores tienen una predisposición genética.

¿Cuáles son los tipos de cáncer más frecuentes en la infancia?

La AECC divide los tipos de cáncer infantil más comunes en dos grandes grupos, las enfermedades hematológicas y los tumores sólidos. En el caso del primer grupo, hay dos tipos:

1. Leucemia

Es un tipo de cáncer de la sangre que se origina en la médula ósea. Está provocado por la proliferación incontrolada de unas células que se denominan “blastos” (glóbulos blancos inmaduros) que se acumulan en la médula ósea. Esto hace que desplace al resto de células sanguíneas por lo que que el menor presenta síntomas de anemia (cansancio, palidez…) y riesgo de hemorragia (hematomas).

2. Linfomas

Se trata de cánceres que se desarrollan a partir del sistema linfático, que a su vez forma parte del sistema inmunológico. El sistema linfático está formado por órganos como el bazo, el timo, los ganglios o la médula ósea. Hay otros órganos que tienen tejido linfoide como las amígdalas, la piel o el estómago. Un linfoma puede desarrollarse en cualquiera de ellos.

El más frecuente en los niños es el Linfoma no Hodgkin. A menudo afecta al intestino delgado o el mediastino, que es el espacio entre los pulmones. El Linfoma de Hodgkin afecta a los ganglios linfáticos periféricos en personas de 10 a 30 años.

En cuanto a los tumores sólidos, estos no siempre se refieren a cáncer. Un tumor puede ser también benigno. Los más frecuentes en los niños son los tumores del sistema nervioso central, el neuroblastoma, el Tumor de Wilms, el retinoblastoma, el osteosarcoma o el sarcoma de Ewing.

¿Cuál es el cáncer infantil más común?

De todos los anteriores, el tipo de cáncer infantil más común es la leucemia. Esta se incluye dentro de las enfermedades hematológicas (junto al linfoma). Tal y como explica la AECC, el tipo más frecuente de leucemia que afecta a los niños es la leucemia linfoblástica aguda. Afecta a los linfocitos y el porcentaje más importante de niños con este tipo de leucemias tiene entre dos y ocho años, aunque también se puede dar en niños más pequeños o mayores.

Por otro lado, la leucemia también puede ser mieloide o granulítica aguda. Esta suele afectar a los adultos mayores de 25 años. Sin embargo, también puede aparecer durante la infancia o la adolescencia. Las células malignas se originan a partir de las células que dan origen a los neutrófilos. Estas son células inmunitarias que acuden rápidamente a las infecciones para combatirlas.

Y, por último, la leucemia mieloide crónica que es muy rara en los niños. Se caracteriza por la existencia de un gran número de neutrófilos inmaduros.

Tipos de tumores sólidos más habituales en niños

Hay diversos tipos de cáncer producidos por un tumor sólido:

Tumor del sistema nervioso

Los tumores cerebrales son los segundos más frecuentes en niños, tras la leucemia. Puede aparecer en cualquier edad, aunque lo más frecuente es que lo haga entre los cinco y los diez años de vida. Entre sus síntomas están las convulsiones, cefaleas, vómitos, irritabilidad, alteraciones de la conducta, somnolencia, etc…

Neuroblastoma

Se origina en las células nerviosas de la glándula adrenal. Esta se encuentra cerca de los riñones, que es el lugar más frecuente de aparición. Pero también en el tórax, el cuello y en la médula espinal. Es un tipo de cáncer que solo afecta a los niños (por lo general, por debajo de cinco años). Entre los síntomas más destacables están la presencia de una masa y dolor abdominal, que puede venir acompañado de diarrea y dolor de huesos.

Tumor de Wilms

Suele aparecer antes de los 10 años. Se trata de un tumor maligno que afecta al riñón. Los síntomas más frecuentes de este cáncer infantil son la presencia de una masa abdominal, fiebre, pérdida de apetito, presencia de sangre en la orina o dolor abdominal.

Retinoblastoma

Es un tumor maligno de la retina. Lo más frecuente es que este tumor se desarrolle en niños menores de cinco años, aunque puede aparecer a cualquier edad. Es una de las patologías más graves de oftalmología.

Rabdomiosarcoma

Este cáncer infantil afecta principalmente a las células de los músculos, sobre todo en la cabeza, el cuello, la pelvis y las extremidades. Es más frecuente en varones de entre dos y seis años.

Osteosarcoma

Es la forma de cáncer de hueso más frecuente en los niños. Suele aparecer en el húmero, el fémur o la tibia. Al igual que el anterior, afecta más a varones de entre 10 y 25 años.

Sarcoma de Ewing 

Es otro tipo de cáncer de hueso pero afecta a una parte diferente. En este caso a la diáfisis o parte central del hueso. Se suele presentar entre los 10 y 25 años y, de nuevo, afecta más a los varones.

¿Cuál es la tasa de supervivencia del cáncer infantil?

Gracias a los avances en las técnicas para su diagnóstico y en los tratamientos del cáncer infantil, la supervivencia ha aumentado en los últimos años en nuestro país. Actualmente, entre el 70 y el 80% de los niños que lo padecen logran superarlo.

Pese a ello, el cáncer infantil sigue siendo una de las primeras causas de mortalidad entre niños y adolescentes, según la OMS. Además, la probabilidad de sobrevivir a esa edad depende del país del niño. En algunos países con ingresos medios o bajos esa tasa de curación va del 15% al 45%.

El año pasado, la Asociación Española de Pediatría (AEP) aportaba otro dato llamativo: El 70% de los niños que superan un cáncer tienen secuelas. Son secuelas «tanto a nivel orgánico como funcional, estético y neurocognitivo”. Lamentablemente no existen «métodos eficaces» para prevenir el cáncer infantil.

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